Aumentaron pobreza e indigencia durante 2019, acompañando caída de la economía

De acuerdo al estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2019 crecieron los porcentajes de indigentes y pobres en el Uruguay respecto a 2018, manteniendo la tendencia de los últimos años, en tanto durante los meses de enero, febrero y marzo se estima que se ha acentuado esta tendencia, aún sin tener en cuenta la incidencia de la epidemia de coronavirus.
En base a la Encuesta Continua de Hogares, surge que en el año cerrado en diciembre último, el total de hogares bajo la línea de indigencia (LI) se ubicó en 0,1%, el total de personas bajo la línea de indigencia se ubicó en 0,2%, el total de hogares bajo la línea de pobreza (LP) se situó en 5,9%, y el total de personas bajo la línea de pobreza se ubicó en 8,8%.
En otras consideraciones, surge que para el año 2019 en el total del país, la proporción de hogares bajo la LI se estimó en 0,1 por ciento. Esto significa que, cada 1.000 hogares, uno no supera el ingreso necesario para cubrir las necesidades básicas alimentarias.
La incidencia de la pobreza se estimó en 5,9 por ciento, implicando que cada 1.000 hogares 59 se encuentran por debajo de la LP. La estimación de la indigencia a nivel de personas para el total del país señala que, de cada 1.000 personas, 2 no alcanzan el ingreso mínimo previsto para cubrir las necesidades alimentarias básicas.
Por su parte, el valor que toma la proporción de personas pobres para el año 2019, implica que de cada 1.000 personas, 88 de ellas no superan el ingreso mínimo para cubrir las necesidades básicas alimentarias y no alimentarias consideradas por esta metodología.
La incidencia de la pobreza en hogares registra un incremento en 0,6 puntos porcentuales respecto al año 2018. La incidencia de la indigencia, por su parte, se mantiene en niveles similares a los del año anterior.
Respecto a 2018, la estimación de la indigencia en personas para el total del país se incrementa en 0,1 puntos porcentuales, mientras que la estimación de la incidencia de la pobreza se ubica 0,7 puntos porcentuales por encima del valor registrado para 2018.

FRANJAS DE INGRESOS

Según el INE, un hogar es considerado indigente o pobre extremo, si el ingreso corriente per cápita con valor locativo del hogar es inferior al valor de la Canasta Básica Alimentaria (LI). Las personas indigentes son los miembros de un hogar indigente.
Un hogar es considerado pobre, si el ingreso corriente con valor locativo del hogar es menor al de la línea de pobreza determinada para ese hogar (la línea tiene en cuenta la canasta básica de alimentos, la no alimentaria y el número de integrantes del hogar). Las personas pobres son aquellas que pertenecen a un hogar pobre.
A modo de ejemplo se detalla los valores de la LP (para Montevideo, Interior urbano e Interior rural), correspondientes al mes de enero 2019; según la cantidad de miembros del hogar. El hogar cuyo monto total de ingresos líquidos esté por debajo de dicha línea se considerará en situación de pobreza.
En situación de pobreza, en Montevideo, para un hogar de una sola persona, la línea de pobreza se mide en los 13.488 pesos, para el interior urbano de 8.714 y para el interior rural, de 5.890. Para dos personas, en Montevideo 24.361 pesos, en el interior urbano 15.975 pesos y para el interior rural 10.980. Para tres personas, en Montevideo, 34.488, en el interior urbano 22.822 y en el interior rural 15.843.
Quiere decir, a modo de ejemplo, que un hogar de Montevideo compuesto por 3 personas, con ingresos totales líquidos inferiores a $34.488 se considera como un hogar pobre. Si el total de ingresos líquidos fuese igual o superior a dicho monto, se considera un hogar no pobre.

POR REGIONES

Al analizar los indicadores según áreas geográficas a nivel de hogares, se percibe que la proporción de hogares indigentes no presenta diferencias entre las mismas. En relación a la proporción de hogares pobres, es Montevideo la región que presenta el valor más alto, seguido de las localidades del interior de menos de 5.000 habitantes. El área rural es la que presenta la proporción más baja de hogares pobres.

DISTRIBUCIÓN TERRITORIAL

La incidencia de la pobreza presenta una distribución heterogénea en el territorio nacional. Los mayores valores se registran principalmente al norte y noreste del país, en los departamentos de Rivera, Treinta y Tres y Montevideo con niveles iguales o superiores al 8%, seguido de Artigas, Cerro Largo, Durazno y Tacuarembó. Los niveles más bajos corresponden principalmente a departamentos centro sur del país.
La heterogeneidad territorial se observa también al centrar el análisis en la capital del país, siendo en la periferia donde se registran los mayores niveles de pobreza, mientras que los menores porcentajes de hogares pobres se registran en la costa sureste del departamento.

SEGÚN SEXO DEL JEFE DE HOGAR

La indigencia presenta igual valor en los hogares con jefatura femenina que en aquellos con jefatura masculina (0,1%). Sin embargo, la pobreza continúa afectando en mayor medida a los hogares con jefatura femenina, tanto en Montevideo como en el interior del país.

SEGÚN GRUPOS DE EDADES Y ASCENDENCIA ÉTNICO RACIAL

La edad y la ascendencia étnico racial de las personas son variables relevantes para el análisis de la pobreza. Esta afecta en mayor medida a los más jóvenes; en particular, es en los menores de 6 años y en los niños de 6 a 12 años donde se registran los mayores niveles, independientemente de la región del país que se considere. En términos de la ascendencia étnico racial de las personas, es la población afrodescendiente la que continúa registrando mayores niveles de pobreza. En 2019, para el total del país, la incidencia de la pobreza para las personas que declaran tener ascendencia afrodescendiente es superior a la estimación para quienes declaran tener ascendencia blanca en más de 11 puntos porcentuales.

BRECHA DE POBREZA

Para el año 2019, el valor de la brecha de pobreza se ubicó en 1,3. Este valor refiere al promedio de las proporciones de ingreso que necesitarían los hogares pobres, respecto a su línea de pobreza, para dejar de serlo. Un incremento respecto al año anterior implica que los hogares pobres necesitan, en promedio, un nivel mayor de ingresos que el año anterior para que alcancen su LP.
La severidad de la pobreza en 2019, tomó el valor de 0,5. Este indicador disminuye cuando se reduce la brecha de pobreza y cuando se reduce la desigualdad al interior de la población que se encuentra debajo de la LP.
Montevideo, Canelones, Lavalleja, Treinta y Tres, Durazno, Soriano y Salto son los departamentos con mayor nivel de desigualdad. Por su parte, los departamentos de Colonia, San José y Artigas son los que presentan los menores niveles.