Libertad, Igualdad y Fraternidad en tiempos de pandemia de coronavirus

Con un acto al pie del monumento al general José Artigas, la comunidad francesa y el cónsul honorario de Francia en Paysandú, Gilles Segarra, recordaron el inicio de la Revolución Francesa, con la toma de la prisión de la Bastilla que puso fin a la monarquía y redactó la primera constitución democrática.
Bajo el lema de Libertad, Igualdad y Fraternidad se forjaron los ideales de una nación, cuyo mensaje “sigue vigente desde hace 231 años. Fue un hito en la historia de la humanidad, donde por primera vez se deletrearon los derechos del ser humano y del ciudadano. Hoy están vigentes, pero en muchos casos están limitados”, dijo Segarra a EL TELEGRAFO.
Reflexionó que, como humanidad, “nos encuentra en una fecha especial y en una situación muy particular en el mundo entero, donde un virus nos hizo cambiar nuestros estilos de vida, costumbres y hasta nuestra relaciones entre países y entre personas”. En este tiempo “tenemos mucho para reflexionar, cambiar y volver a ser más humanos. Más aún de lo que hemos sido en los últimos cien años”, porque “hemos ido hacia una carrera por tener y tener, sin objetivos claros”.
Segarra consignó que, por esa razón, “tratamos de volver a aquello de la libertad, que cada vez la apreciamos más y de la igualdad de oportunidades. Este virus nos puso en igualdad de condiciones y ninguna clase social está libre de contagiarse e incluso muchos de los muertos en el mundo corresponden a clases sociales más elevadas”.

INTEGRADOS

En Uruguay, “los franceses están muy integrados a la sociedad y sobre todo en Paysandú. Tan integrados que a veces es difícil sacarlos de sus casas en una fecha como hoy. Por el mundo no han tenido grandes problemas de adaptación, pero en Francia existen algunos problemas internos”. En aquel país, “hubo enormes inmigraciones a diversas partes del mundo, que ha permitido un sincretismo entre todas las culturas”.
Reconoció que “Francia hoy también tiene problemas con la pandemia y una zona complicada, sobre todo el oeste. Lo que sí es real es que la humanidad no volverá a ser igual a lo que era hace unos cuatros meses atrás”.