La Justicia condenó a cinco años de prisión a un hombre de 26 años que admitió su participación en el asalto a mano armada perpetrado en un almacén de la zona de Azucitrus. El mismo, además, reconoció ser el propietario del automóvil que fuera usado para el hecho y posteriormente abandonado en barrio P-3. Fuentes confiables precisaron que la investigación continúa a fin de dar con los demás involucrados.
En tanto, otro hombre –poseedor de antecedentes penales– fue penado por llevar un arma de fuego. Si bien no pudo ser probada su vinculación al asalto, no se descarta que haya formado parte de la banda de entre 3 y 5 que iban a bordo del auto en que se desplazaban los delincuentes.
Como informara oportunamente EL TELEGRAFO, próximo a las 21 del pasado lunes se alertó al 911 de un asalto en un almacén ubicado en Dr. Roldán vieja y Calle 31, frente a Azucitrus. La persona que dio cuenta del hecho dijo que entre tres o cinco personas que circulaban en un auto de color bordó habían robado dinero y estaban armados. Asimismo, aportó las posibles letras que corresponderían a la matrícula del rodado.
Al lugar concurrió un móvil de la Unidad de Respuesta Policial que se entrevistó con la víctima. Nerviosa por la situación vivida, la señora dijo que estaba atendiendo en el almacén –junto a una joven– cuando entraron dos hombres con ropa oscura, con un arma tipo pistola y otra de caño largo, que mediante amenazas y el uso de la fuerza lograron llevarse una cifra cercana a los 30.000 pesos. Una vez obtenido el botín, los delincuentes se subieron al automóvil que los esperaba en marcha y huyeron por Dr. Roldán vieja al sur.
Con los datos aportados por la víctima y un testigo, desde el Centro de Comando Unificado Departamental se amplió la información a los móviles que estaban patrullando, lo que permitió implementar un rápido operativo en puntos claves donde los delincuentes podrían dirigirse. Así, un móvil ingresó al barrio por calle Setembrino Pereda al norte. En la intersección con Diagonal 200, fue encontrado un auto –matriculado como LGA 2285–cuyas características coincidían con el usado en el asalto. Consultado el Sistema de gestión en seguridad pública (SGSP) que posee el ministerio del Interior, el rodado no figuraba como requerido.
En tanto, al conocerse que los ocupantes portaban armas, móviles de la Unidad de Respuesta Policial, del Grupo de Respuesta Táctica y de la Unidad de Investigaciones confluyeron en la cuadra señalada con el objetivo de detenerlos. Fue detenida una pareja que caminaba por la cuadra de manera sospechosa. Uno de los integrantes de la dupla, al ver a la Policía, intentó deshacerse de un arma calibre .32 largo con dos cartuchos, la que fue incautada.
Continuando con las actuaciones, se estableció la identidad del propietario del auto, que fue detenido en un barrio de la zona noreste. Indagado, R.A.P.F. (carente de antecedentes) admitió en forma voluntaria haber participado del asalto como conductor y que el auto lo dejó abandonado para poder huir.
Una vez en la órbita penal, se dispuso la formalización de la investigación para Luis Alberto Silveira Burgos, de 26 años, por un delito de porte de arma por reincidente en concurso formal con un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego, imponiéndole como pena cuatro meses de prisión efectiva. Y para R.A.P.F por un delito de rapiña especialmente agravada, en calidad de coautor, imponiéndole como pena 5 años y 4 meses de prisión efectiva.
