Ifer apunta a nueva logística el próximo invierno con el Frío Polar

El director departamental del Mides, Ignacio Ifer.

El director departamental del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Ignacio Ifer, aseguró que “no estamos conformes para comenzar otro invierno de la misma forma”, al referirse a las plazas disponibles en el refugio y a la logística desarrollada en el marco de la última operativa con destino a las personas en situación de calle.
No obstante, reconoció el aporte interinstitucional y los resultados arrojados a nivel departamental. “Hemos salvado la ola de frío con ayuda de la Intendencia, con una fortaleza impresionante de las Fuerzas Armadas y la Policía Comunitaria, pero no estamos conformes para comenzar otro invierno de la misma forma, porque tenemos un refugio con 34 plazas ocupadas. Llegaron a estar hasta 20 personas en el Estadio Cerrado con la complejidad de que la Intendencia lo presta, cuando hace mucho frío, pero después de las 22, por los encuentros deportivos, y tienen que estar saliendo a las 7.30”.
Explicó que “muchos de ellos trabajan en la naranja o en otras zafras y hay personas que precisan un refugio más prolongado con otra atención. Allí tuvimos a personas que recuperaron recientemente la libertad junto a personas con patologías siquiátricas. El ministro nos pidió que hiciéramos los controles personalmente y nos turnamos entre el director adjunto Pablo Curbelo y yo. Se subsanaron algunos desencuentros entre personas que se conocían desde la cárcel, pero no hubo prevención en ese tema”.
Las personas que se encuentran en situación de calle “son más o menos las mismas, con una pecualiridad y es que cuando se cambió de lugar el refugio, teníamos la posibilidad de extender los cupos a 20 personas más. Cuando se hizo el traslado para la nueva casa, el gobierno anterior no previó lo que pasaba con esas otras 20 personas. Por eso tuvimos que recurrir al Estado y al batallón, donde se quedaron cinco”, señaló a EL TELEGRAFO.

MULTICAUSAL

Las causas por las que una persona se encuentra en situación de calle son variadas. “Entre esa población hay consumidores de sustancias, personas que han roto sus lazos familiares o han recuperado su libertad. Paysandú es uno de los destinos de reclusión más requeridos, porque es de los menos represivos y cuando cumplen una condena, la liberación es en la puerta. Tenemos muchas personas que son de otros departamentos y se encuentran acá. Lo primero es que tratamos de vincularlo con su familia porque es lo más sano para todos”.
El Mides se encarga del costo del pasaje, la policía comunitaria los acompaña hasta la terminal y al llegar a su destino, lo esperan otras autoridades del ministerio con su familia. “Eso es lo ideal, pero cuando no se da, el Estado debe estar a la altura para brindar los servicios. Por eso es necesario aumentar los cupos o disminuir la cantidad de personas en situación de calle. Algunos casos son imposibles porque tienen una patología siquiátrica que no quieren cambiar”.
Relató que recibió un testimonio de esas características. “’Si me muero, no me importa. Yo me quiero morir’, me dijo una persona. Entonces, ¿cómo se hace para intervenir? Le dije que tenía la edad de mi abuelo y no iba a dejarlo ahí. Me quedaba con él y si yo me enfermaba era su responsabilidad, le dije en broma. Así logré que me acompañara al refugio. Fue la forma que encontré, pero me di cuenta que para esa persona valía más la vida de un extraño que la suya”.

FUERZAS ARMADAS

Ifer resaltó la “colaboración de las Fuerzas Armadas en el programa Frío Polar y en cualquier actividad donde necesitemos la logística. Sin ellos no hubiera sido posible dar de comer a tantas personas y nos apoyamos también en la Policía Comunitaria”. Recordó que “en la última ola de frío tuvimos 34 personas en el refugio principal y fueron 15 al Estadio. Casualmente ya no tuvimos que disponer del cuartel porque quienes se alojaban allí, encontraron trabajo y se fueron a la zafra del citrus. Fueron 49 personas y son menos que en la oportunidad anterior”.