El intendente Mario Díaz evaluó el relacionamiento de la gestión saliente con el sistema cooperativo en general y definió que “hubo una revalorización de su trabajo en todas sus dimensiones”. Aseguró que las cooperativas sociales, “oportunamente promovidas por el Ministerio de Desarrollo Social, fueron una alternativa para la promoción de fuentes de trabajo con personas que habían quedado por fuera del mercado laboral, a través de un mecanismo que permitía la contratación directa por parte de los organismos públicos con un seguimiento y apoyo del Mides en aspectos técnicos”.
La Intendencia de Paysandú “hoy tiene contrato con seis cooperativas sociales en distintas áreas. Algunas están en ambos centros termales, otras dedicadas a la recolección de residuos o clasificación y en el municipio de Piedras Coloradas, donde brindan un apoyo importante ante el déficit de personal en algunas áreas”.
Paralelamente, el sistema cooperativo por ayuda mutua para la construcción de vivienda, “tuvo un desarrollo a lo largo de los cinco años. Cuando asumimos, la principal demanda eran los terrenos porque sin la tierra no tienen siquiera posibilidades de presentarse a los sorteos para obtener préstamos que les permitan comenzar a construir”, dijo a EL TELEGRAFO.
Recordó que destinaron “una cantidad importante de recursos para la creación de una cartera de tierras que permitió por un lado la adquisición de Paylana, donde ocho cooperativas se encuentran en diferentes procesos. Tres están en construcción, a una cuarta le fue adjudicado y estamos a la espera del préstamo para pagar la tierra”. Definió que el “fuerte vínculo con las cooperativas” se definió además “con el apoyo de la Intendencia en maquinaria, por ejemplo, para la generación de la caminería interna y hemos cooperado con el saneamiento”.
Según Díaz, “el sistema cooperativo tiene mucho para crecer, particularmente las cooperativas sociales y no tengo claro cuál será su destino a partir de la nueva administración, pero valoro en forma muy positiva todo el trabajo que se hizo. Apunta a un sector que si no es a partir de ese tipo de herramientas, tendría pocas chances de insertarse en el mundo del trabajo”.
Finalmente reconoció que “estamos también en contacto con las cooperativas de producción, quizás en menos escala, pero la vocación del Instituto Nacional del Cooperativismo (Inacoop) de instalar su sede regional en Paysandú, de alguna forma habla de las fortalezas del departamento en materia de cooperativismo”.
