Avances en construcción del Programa Nacional para erradicar mosca de la bichera en Uruguay

La mayoría de las gremiales proponen la creación de un instituto que lidere el control de la mosca de la bichera.

El gusano barrenador del ganado (GBG), Cochliomyia hominivorax (Coquerel), más conocido como “bichera” en el Uruguay, en su etapa larvaria es una parasitosis grave que afecta a todos los animales terrestres de sangre caliente, incluidos los seres humanos. Es particularmente dañino para los productores de ganado, pero también es un grave problema de salud pública. La mosca de la bichera causa pérdidas anuales por U$S 40 millones.
El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Carlos María Uriarte y su grupo de trabajo conformado por técnicos de diferentes disciplinas del MGAP; Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL); Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y el Instituto Plan Agropecuario (IPA) se reunieron (de forma virtual) con gremiales agropecuarias para seguir intercambiando sobre el Programa para erradicar la bichera en el Uruguay.
Estuvieron presentes referentes de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), de la Comisión Nacional de Fomento Rural (CNFR), de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL), de las Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) y de la Federación Rural (FR).
El objetivo del encuentro fue sumar para la conformación del Proyecto de Ley, que posteriormente deberá ser presentado al Parlamento.
La parasitosis es responsable de pérdidas anuales por U$S 40 millones y todo está dado para que en cuatro años, utilizando moscas esterilizadas mediante irradiación, se controle y erradique la plaga, que además es una zoonosis.
El proyecto que impulsa el gobierno está pactado a cinco años. Serán uno de preparación, dos años con la suelta de moscas estériles y uno de aislamiento de la zona. En tres años se estaría con las bicheras controladas. Equipos de técnicos en tierra darán apoyo a los productores en las diferentes zonas y harán monitoreo de campo.
El titular del MGAP había enviado un borrador del proyecto de ley a las gremiales para que lo analizaran y luego se abriera un diálogo buscando llegar a un consenso. La inquietud de las gremiales estaba focalizada en la gobernanza del Instituto que propone el proyecto, porque debe dársele un marco legal. También se sumó el financiamiento, pues demanda la introducción y suelta de moscas estériles aportadas por la planta de la Copeg, que lidera la erradicación del parásito en Estados Unidos y algunos otros países.
Según supo El País, en el encuentro hubo una postura mayoritaria de las gremiales apoyando la creación de un Instituto que lidere el control y la erradicación. La postura se inclina a que ese organismo tenga una vida menor a cinco años. Incluso, la Asociación Rural del Uruguay propuso que ese Instituto esté anclado en el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) para agilizarlo y evitar invertir más dinero.
Respecto al financiamiento de la campaña sanitaria, hubo posiciones diferentes, pero la gran mayoría de las gremiales participantes en la reunión con Uriarte, coincidieron en no incrementar impuestos específicos y analizar tasas y aportes del sector agropecuario que van a Rentas Generales y no vuelven al campo.
Pablo Perdomo, presidente de Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) reconoció que el encuentro con el ministro fue muy bueno. Dijo que particularmente CAF apoya la postura de crear un nuevo instituto y aclaró: “estamos abiertos a discutir el financiamiento”.
Perdomo dijo que las gremiales y particularmente CAF, “valoramos mucho la instancia”, porque la meta es lograr un consenso. “Vamos por crear una institución con vida más corta. Eso lo dijeron varias gremiales”.
El dirigente dijo que CAF planteó también la duda de qué pasará el quinto y sexto año, una vez que se termine el instituto; “cómo se sigue en cuanto a gobernanza y financiamiento, porque vamos a estar en otro período de gobierno”.