Mulitas aprovecha la inactividad para avanzar en su campo de juego propio

Los integrantes de Mulitas Rugby cambiaron los entrenamientos por jornadas de trabajo para la construcción de su cancha.

En el parque Adeyom, el predio ubicado en Naciones Unidas y ruta 3, se está levantando la cancha de rugby del equipo sanducero Mulitas. Los trabajos los llevan a cabo los propios integrantes de la institución y sus planteles.
Diego González Grampín y María Meireles Álvarez, referentes de Mulitas, indicaron que la detención en la actividad deportiva a la que obligó la pandemia, les ha permitido enfocarse en hacer avances en su futuro campo deportivo.
“Estamos haciendo limpieza y el cercado de la cancha, hoy (ayer) fuimos a medir y a colocar las estacas donde van a ir los pozos para los postes del alambrado”, indicó Meireles.
González destacó que también están plantando “los 55 árboles que nos dio Facultad de Agronomía, todos árboles autóctonos. En el proyecto de la cancha de Mulitas está planteado recuperar un poco la costa del arroyo Sacra, que tiene un problema de erosión, allá hay árboles, pero son todas especies invasoras, no son árboles autóctonos”.
Además de ayudar en la contención de la erosión, los árboles permitirán controlar la humedad del terreno, esperan.

AVANCES

Simultáneamente se está trabajando en el cerramiento, “para próximamente ya aplicar el raigrás, para tener césped de invierno también; estamos trabajando en las ‘H’, estamos cortando fierros y soldando, y después siguen las tareas de limpieza; también se está formando la platea para lo que va a ser la ranchada de Mulitas, para recibir ahí a los otro equipos, cuando se reactive el campeonato”, dijo González a EL TELEGRAFO.
Las dimensiones del campo de juego les permitirán disputar allí la actividad oficial.
“La idea es jugar ahí, las dimensiones del terreno dan bien de bien para una cancha profesional de Rugby y la idea es tenerla para los próximos partidos que tenga Mulitas”, insistió el presidente del club.
En el predio también va a funcionar la escuela que gestiona la institución, pero además se pretende trabajar con la comunidad del lugar. “La escuelita está contemplada en el proyecto, pero también queremos ofrecer un lugar al que los gurises vayan y aprendan un deporte. Es una de las zonas más vulnerables que hay en Paysandú, ahí en la vuelta no tenés nada, no tenés una cancha de fútbol, ni un complejo deportivo, nada. Entonces la idea nuestra es invitar, enfocarnos en la comunidad del lugar y trabajar con la Escuelita de Rugby, que venimos trabajando con la Intendencia, con el director de Deportes, Guillermo Arias. Va a ser una zona con movimiento”, señaló Meireles.

EN PAUSA

En cuanto a la actividad deportiva “está todo parado; en masculino nosotros cumplimos una fecha, que fue el 14 de marzo –el último fin de semana antes de esta nueva ola de la pandemia–. Llegamos a debutar frente al equipo de Rivera, jugamos acá la primera fecha, perdimos por 36 a 6”. El resultado se asumió como parte del proceso de crecimiento. “En Mulitas la idea es cosechar experiencia, somos un cuadro totalmente nuevo en el ámbito del rugby, el año pasado disputamos poquitas fechas, este año teníamos la esperanza de cumplir varias fechas, pero de vuelta con la COVID-19 se pausó todo hasta nuevo aviso”.
El equipo femenino no alcanzó a debutar. Solamente jugaron un encuentro amistoso, el mismo día, también frente a un equipo de Rivera.
Los entrenamientos se orientan por medios virtuales. “Estamos cumpliendo con los protocolos, cada uno tiene una rutina y sale a correr, a trotar o hacer algo, de forma individual. En estos casos que no te ves todos los días, que no tenés prácticas, para no perder la gente y seguir motivándolos, tenés que apostar a las redes sociales, a los grupos de WhatsApp”, explicó Meireles.
Sin embargo hallaron un espacio para encontrarse en las jornadas de trabajo en la cancha. “Aprovechamos, como no hay prácticas, para no perder la continuidad. Hay muchachos que salen solos y hay otros a los que no les gusta, si no está el grupo de amigos no se suman, no se prenden; entonces lo que hacemos es que van a las jornadas de trabajo en la cancha, nos vemos, de a ratos sale algún jueguito, pero nos estamos volcando más a trabajar en la cancha.