Un adiós para Camilo Grau

Una triste noticia conmovió a los sanduceros, especialmente a aquellos vinculados al arte y la cultura: el pasado 11 de abril, diagnosticado con COVID-19, falleció a los 47 años Camilo Grau Martínez, músico, gestor cultural y productor muy vinculado a Paysandú.
Nacido el 17 de setiembre de 1973 en Valencia, Venezuela, hijo del músico sanducero José Gabriel Grau Ibarburu, quien ese mismo año se había exiliado en ese país. Poco antes de cumplir un año, la familia se trasladó a Maracaibo. Desde temprana edad vivió y disfrutó la emoción de la música a través de su padre, quien formó parte de bandas y agrupaciones locales venezolanas. A los 10 años Camilo comenzó a estudiar órgano, primero con su padre, y luego en la academia musical Yamaha.
Cuando tenía 14 años, su familia tomó la decisión de regresar a Uruguay. Entre 1988 y 1990 vivieron en Paysandú, donde asistió al Liceo 2. Continuó sus estudios musicales de piano y solfeo en el Conservatorio Vicente Pablo, sumando luego como instrumento secundario la guitarra. Participó tocando en algunos festivales, junto a su hermano José Gabriel, y en un trío que ambos formaron junto a su padre, con el cual acompañaron al cantante Omar Pandolfo en la Semana de la Cerveza. Tras esa etapa sanducera, Camilo y su hermano se trasladaron a Montevideo a vivir con su madre.
“Camilo los conoció a todos ustedes, y siempre estuvo en contacto con esa tierra que desde siempre nos abrazó, donde hicimos varios amigos”, recuerda José Gabriel (h). “Luego que volvimos a Montevideo, siguió viajando a Paysandú las veces que podía, siempre manteniendo contacto con ustedes”, expresó, recordando especialmente que su hermano “tuvo una afinidad importante con Andrés Cairo y con (el grupo de parodistas) Antifaces” (…) “Nuestro paso por Paysandú fue y será muy importante para nuestras vidas, puedo asegurarlo. Por eso siempre digo que somos venezolanos de nacimiento, pero sanduceros por adopción”.
En Montevideo Camilo estudió diseño, publicidad y marketing –rubros en los que también se destacó– y comenzó a trabajar como gestor y productor independiente en el área musical y teatral. En 2002 viajó a España a trabajar para una agencia de medios. Radicado en Alicante, integró la comisión de fiestas de Xabia International, formando parte de la organización, montaje, logística y responsable artístico de las agrupaciones que se presentaban. En 2010 se radicó en Valencia, donde fundó una empresa de medios destinada a la recreación, ocio y cultura, ofreciendo y gestionando actividades culturales de captación y participación social. Junto con un grupo de colegas en producción, representación y gestión, formó una red de intercambio y apoyo a artistas denominada Management & Booking.
En 2013 regresó a Uruguay. Radicado en Parque del Plata, Canelones, se dedicó desde entonces a la producción y gestión de artistas y proyectos culturales. En setiembre de 2018 Camilo visitó Paysandúcomo productor de Rossana Taddei, quien llegó a Paysandú para presentar su álbum, “Cuerpo eléctrico”. Venía también trabajando con el cantautor sanducero Juan Mendiverry, con quien incluso colaboró en el diseño de la portada del disco “Creo”.
Uno de sus últimos trabajos junto a su hermano fue para el concierto de los 70 años del Hot Club de Montevideo, cumplido el 9 de noviembre de 2020 en el teatro Salís, donde tuvieron a cargo el diseño gráfico, la comunicación y producción. En 2020 había organizado el Pandemia Fest, un festival que propone por streaming “para disfrutar en tiempos de cuarentena”, que llegó a reunir unos 130 artistas, entre nacionales y extranjeros, entre ellos varios sanduceros. “Camilo siempre fue muy generoso con su tarea de diseñador gráfico, diseñador web, producción musical, ayuda a los artistas y demás”, recordó su hermano. “Como dice Zelmar, su hermano que vive en España, nunca tenía un ‘no’ para nadie, siempre estaba metido en algo que tenía que ver con la cultura. Aunque no hubiera un mango, él se metía igual. Una persona realmente desinteresada, que ayudó a mucha gente”.