“La problemática de las drogas debería tratarse en la educación”

Edila nacionalista Sabrina Buono.

Pasó a estudio de las comisiones de Promoción Social, Higiene y Medio Ambiente de la Junta Departamental el planteo de la edila nacionalista Sabrina Buono referente a la necesidad de que se considere la problemática del tema drogas por parte del sistema educativo, con un abordaje integral y que cause impacto significativo en quienes son los receptores de las acciones de concientización.
La moción “Los usos de drogas y su abordaje en la educación. Manuales para su uso en educación inicial, primaria y secundaria”, en su argumentación expresa que “he notado con honda preocupación, lo poco o nada que habla el sistema educativo, tanto en educación media como en educación primaria, sobre el tema de las drogas”.
Precisa Buono que “entiéndase por drogas, según la Organización Mundial de la Salud ‘toda sustancia que introducida en un organismo vivo, pueda modificar una o varias de sus funciones’. Es un concepto por demás amplio, pero en lo que a esta moción respecta, me voy a referir a la puesta en práctica de dos manuales llamados ‘Los usos de drogas y su abordaje en la educación’, uno elaborado para educación media y otro para educación inicial y primaria, los que fueron aprobados por la Comisión Interinstitucional Nacional de Drogas JND/ANEP/Codicen en el año 2009 y que contienen orientaciones para la promoción de salud y prevención, en esos niveles”.
Acota que “días pasados se presentó por la Junta Nacional de Drogas, el plan Estratégico Nacional que llevará a cabo el gobierno. Observé con atención y con cierta preocupación que en el panel de expositores no estaba el ministro de Educación y Cultura, siendo que desde la educación es por donde hay que comenzar. Desde el aula es desde donde podremos abordar de forma integral el tema de las drogas, del tabaco, del alcohol; con trabajo de maestros y profesores e involucrando a los padres, no ya cuando el problema está instalado y la política que se necesita pasa a ser recursos en salud para atender el consumo problemático, o lo que es más preocupante, recursos en represión, porque como sabemos, las guerras entre narcos se llevan vidas o toman barrios enteros en diversos puntos del país, siendo la causa además de varios delitos, ente otros: rapiña, lavado de activos, tráfico de armas, por nombrar solo algunos”.

Información como prevención

“El día 18 de junio de 2021 el expresidente de la República José Mujica participó en un conversatorio organizado por la Universidad Andrés Bello, de Chile, titulado ‘Regularización del mercado de cannabis. Una propuesta para Chile’, donde reconoce que la guerra contra las drogas está perdida hace años en todo el mundo y donde confiesa que sueña con una humanidad que gaste más recursos en sanidad y menos recursos en los aparatos represivos. Personalmente creo que lo ideal sería invertir en educación, en nuestros niños y jóvenes, en darles información, que es la llave de la prevención”, apunta.
“El consumo de drogas, las legales y las ilegales, está permitido en el Uruguay desde hace ya muchos años a los mayores de edad. El tema es que muchas de las drogas que están en el mercado, están ‘institucionalizadas’ por así decirlo, con mensajes y eslóganes que invitan a su consumo y los riesgos para la salud en etapas de consumo tempranas, son enormes. Si podemos retrasar ese consumo, u ordenarlo, ya hemos ganado mucho como sociedad”, reflexiona Sabrina Buono.
Señala que la educación es el arma “más transformadora de conductas y de hábitos y la más necesaria. El tema de las drogas atraviesa toda la sociedad, desde el narcomenudeo en los barrios, hasta el microtráfico en las ciudades, terminando con el narcotráfico, que es ya un fenómeno más internacional, en el que Uruguay ha sido un país de tránsito históricamente, con sus fronteras permeables con sendos países como Brasil y Argentina”.
Sostiene que “reconociendo eso, no podemos ser simplemente espectadores. Tenemos que actuar y las herramientas las tenemos, los manuales citados más arriba están para ser usados por todo el sistema educativo en los dos niveles antes mencionados, junto a toda la información complementaria disponible aprobada por los organismos competentes en la materia, dedicándose tiempo en horas clase, tanto en primaria e inicial como en educación media, para trabajar sobre el tema e informar de los riesgos de un consumo temprano, con un abordaje transversal y continuado en el tiempo. Que no se agote con una intervención puntual en el año, sino que su tratamiento sea desde varios ángulos, ejemplificando; desde educación física hasta educación vial, desde derechos humanos, hasta política ambiental. La escuela y el liceo deben preparar a sus alumnos para los desafíos que la vida les presentará, involucrando a las familias en el tema, como agentes socializadores”.
Pide a los organismos competentes “que se sopese la importancia del tema y se ponga en práctica y se lleven a las aulas los manuales antes citados”.