CUFA reclama diálogo y participación en legislación sobre pirotecnia sonora

La Cámara Uruguaya de Fuegos Artificiales (CUFA) evalúa acciones civiles contra las intendencias que promulgaron legislaciones departamentales que prohíben el uso de pirotecnia, al tiempo que no descarta acciones ante la Suprema corte de Justicia, donde solicitará su declaración de inconstitucionalidad. Sin embargo, “estamos abiertos al diálogo”, dijo el presidente de CUFA, Gustavo Prato.

“El decreto departamental votado en la junta se puede posponer, porque no se consideró a todas las partes y cualquier cosa, para que sea legal, debe darle participación a todos. Esto incluye a CUFA y a los centros comerciales”, dijo a EL TELEGRAFO.

Comparó que “Salto, por ejemplo, legisló y se dio cuenta de que faltó un actor, que es la otra parte. Se escuchó una sola campana y no se escuchó al organismo que regula la pirotecnia, ni tampoco a los sectores que viven de esto. Ahí está la falla de una legislación departamental, incluida la de Paysandú”.
El directivo destacó que la cámara está abierta al diálogo, “pero ocurre como en otros aspectos, un intendente que recién asume precisa tiempo para trabajar. Nosotros, ahora mismo, estamos trabajando para bajar el impacto sonoro. Pero tenemos que explicar que no se puede bajar al ruido similar al que escuchamos en el centro, todos los días, cuando pasa un camión o suena una alarma”.

La legislación

Ante la nueva legislación resuelta por algunos deliberativos departamentales, Prato entendió que “faltó interacción y diálogo de todas las partes. Se escuchó a una campana que es muy activa en la difusión. Nosotros no vamos a decir quién tiene o no tiene la razón. Sino que pedimos que se nos escuche, porque Uruguay es un país de diálogo social y en cualquier ámbito o rubor, siempre se llaman a todas las partes”.
El empresario señaló que “por ejemplo, en Paysandú jamás se nos participó ni a CUFA, ni al Ministerio de Defensa ni a los comerciantes locales. Nosotros nos acercamos a los legisladores locales y al intendente que escucharon nuestra postura y argumentos legales. Pero antes de definir, nunca se nos participó. En Montevideo sí, tuvimos participación”.

La capital del país resolvió que “por este año, dadas las dificultades de control” no innovará en materia de legislación departamental. Prato informó que en el deliberativo montevideano citaron al Ministerio de Defensa y “allí declararon que en plaza –a nivel nacional– existe una cantidad similar a 43 contenedores, importados legalmente. Con esto quiero decir que hay unos cuantos baches y ante una eventual situación de litigio, no ayuda en nada la legislación que se aprobó”.

Recordó que “yo mismo propuse que llamen al presidente, porque este es un país responsable que fomenta la inversión. Que se nos pague por lucro cesante y así se respeta el marco jurídico”. En tal sentido, reconoció que “son muy pocas las intendencias que legislaron. En Canelones, no lo hicieron porque entendieron que no hay una resolución departamental por encima de la ley nacional. Como puede ocurrir en Estados Unidos o en Brasil, que son estados con legislación independiente”.

El presidente de CUFA sostiene que “el documento del Ministerio de Defensa dice que puedo vender en cada departamento del país. Por lo tanto, no es muy coherente que se permita la venta en algunos sí y en otros no, por prohibición de las juntas departamentales”.
Por otro lado, “Presidencia de la República nos hizo hacer determinadas obras y establecer condiciones para guardar los materiales. Por eso, debe hacerse cargo de la situación que nos da inseguridad al inversor. Y mucho más, en momentos en que discutimos la pertinencia de un TLC con China, que no entiende el cambio en la legislación”.

Prato señaló que las decisiones en algunos departamentos “nos cayeron muy mal, porque se planteó al impacto sonoro como si fuera un rubor ilegal. Y ese tema fue el que detonó la respuesta de CUFA. Porque no está bien generar confusión en la población por la ambigüedad de la reglamentación”.

Sonoridad

El directivo de la cámara subrayó que “no es posible legislar sobre la sonoridad. Es como legislar contra los autos que andan muy rápido. En algunos lugares, nunca se habló de decibeles, que es lo que define el ruido. Por eso digo que es ambiguo, en tanto nunca define lo sonoro de lo no sonoro”.
Prato definió que “los petardos o también llamadas bombas, producen el 80% del ruido. Ese tipo corresponde a un 30% del mercado. Dijimos que estamos dispuestos a cederlo, pero el material que contiene una luz al desplegarse, también lleva implícito un ruido. Por eso, realmente hay muchas ambigüedades y detalles en falso. Lo mejor sería –para las legislaciones departamentales– tener un diálogo. Esperar a este año y que salga una legislación nacional”.