El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) firmó un convenio con la Intendencia de Paysandú, por el cual esta queda facultada para el cumplimiento de las funciones que desempeña el Registro de Estado Civil, actualmente a cargo de Juzgados de Paz. La intendencia nombrará Oficiales de Registro Civil a funcionarios en Paysandú y a integrantes de Concejos Municipales en el interior del departamento, aunque no tendrán tal responsabilidad los siete Municipios. El intendente Nicolás Olivera confirmó a EL TELEGRAFO que “muy probablemente acepte personalmente -junto a otros funcionarios por supuesto-, el carácter de Oficial de Registro Civil para casamientos”.
El convenio, que quedará vigente el venidero martes 1º de enero, aun cuando en la práctica será el miércoles 2, fue firmado por el ministro de Educación y Cultura Pablo Da Silveira, el intendente Nicolás Olivera y la directora general del Registro Civil Adriana Martínez. No estaba presente el secretario general Fermín Farinha por encontrarse en Buenos Aires, participando de la Feria Internacional de Turismo (FIT).
La Ley de Presupuesto aprobada en 2020 estableció el pasaje gradual de las funciones del Registro de Estado Civil a servicios dependientes de la Dirección General de Registro Civil (MEC), que a su vez quedó facultada a suscribir convenios con las intendencias para la prestación de los referidos servicios, tal cual fue planteado por Da Silveira ante el Congreso de Intendentes, hace un par de meses, cuando fue recibido en audiencia.
El intendente sanducero explicó que la Dirección de Registro de Estado Civil, a sugerencia de los gobiernos departamentales, podrá investir a funcionarios públicos para el cumplimiento de las referidas funciones en carácter de oficiales de Registro Civil. “Es una nueva función y algo para lo que nos estamos preparando. Ya hubo capacitaciones que permitieron a funcionarios de la intendencia introducirse en esta nueva responsabilidad”, afirmó.
Para el cumplimiento de estas funciones, el MEC proporcionará equipo informático a las intendencias, así como los timbres que acompañarán la generación de toda la nueva documentación de registro. “Para las intendencias es algo novedoso y algo que nos interpela y desafía. Esperamos hacerlo de buena forma”, agregó Olivera. Concordó que “la intendencia tendrá costos agregados, aun no tenemos claro la cifra, pero cuando fuimos convocamos entendimos que era nuestro deber aceptar la responsabilidad. Hay que velar por los sanduceros y el Registro Civil está presente desde el nacimiento y hasta la muerte. No podíamos decir que no. Siempre hay que pensar en la responsabilidad mayor”.
En una primera etapa, la intendencia atenderá en “una repartición del Poder Judicial” en el edificio de 18 de Julio y Zorrilla de San Martín, cuya marquesina actualmente está siendo sometida a reparaciones. “Pero aspiramos a tener nuestro propio lugar, donde darle a los sanduceros un buen servicio. Es bastante común ver los sábados por la noche a personas haciendo fila sentados en sillas plegables. Esperan que se abran las oficinas el lunes siguiente para poder inscribirse para casarse. No es una buena gestión, y aspiramos a mejorarla”, subrayó Olivera.
Da Silveira aseguró que estos cambios se ajustan a los objetivos descentralizadores del gobierno nacional y recordó que en muchos países, tanto europeos como americanos, las funciones de Juzgado de Paz están en manos de las alcaldías. “Creemos mucho en la descentralización y estamos convencidos de que no hay descentralización sin transferencia no solo de responsabilidades sino también de capacidades”, afirmó.
Informó que el MEC está a punto de informatizar en su totalidad las tareas de Registro Civil, habiéndose alcanzado este objetivo en algunos enclaves del sur del país, especialmente el área metropolitana. Ratificó que esta reasignación de funciones irá acompañada de inversión y de reforzamiento de las tareas de apoyo y asesoramiento que el MEC brinda actualmente a los juzgados de paz.
