El sector forestal es uno de los que en los últimos años ha registrado una expansión sostenida que demanda mano de obra calificada y especializada. Precisamente para conocer la oferta educativa en esta área, EL TELEGRAFO dialogó con la Ing. Agr. Forestal Ludmila Profumo Aguiar, perteneciente al Cenur (Centro Universitario Regional) Noreste, donde justamente “uno de los ejes específicos es el Forestal, porque se encuentra en la zona más forestada del país”.
Esta profesional tiene maestría y doctorado en Ingeniería Forestal, con énfasis en Manejo Forestal y en Conservación de la Naturaleza, respectivamente, por la Universidad Federal de Paraná, Curitiba, actualmente es profesora adjunta y asistente académica regional, en el Cenur Noreste de UdelaR.
TÉCNICO FORESTAL
En UTU, se dicta la carrera terciaria de una duración de 2 años, Técnico Forestal, en Tacuarembó y en Rivera. En esta última “es binacional, con cupos para estudiantes uruguayos y brasileros; se dicta en el Polo Tecnológico y depende de UTU y del Instituto Tecnológico del Sur de Brasil (Ifsul). Obtienen 2 títulos, uno en Uruguay y otro en Brasil”, informó.
TECNÓLOGO EN MADERA Y VINCULACIÓN CON EL MEDIO
La Universidad de la República y UTU ofrecen la carrera Tecnólogo en Madera, desde 2012. “Sus clases se dictan en tres sedes: el Polo Educativo de Rivera, que es donde tenemos el Laboratorio de la Madera, el Laboratorio de Informática y algunos salones de clase; en sede Rivera de UdelaR, que está en el Campus, porque en Rivera y Tacuarembó funcionamos en esa modalidad; y en la Escuela Técnica de Rivera, donde hay una carpintería y una sala de afilado, equipados por UdelaR a través del Proyecto Tecnólogos, en esta última se hace el mantenimiento de los equipos y se está viendo la posibilidad de ofrecer servicios”, detalló.
A su vez, “el Tecnólogo en Madera integra la Red de Desarrollo Maderero (Redema), conformada por instituciones y empresas mipymes del sector. A instancias de esa red se creó la Asociación de Empresarios de la Madera y Afines (Adema), que abarca pequeños aserraderos, carpinterías y empresas de afilado, la idea es que sean Pymes. En Rivera ese sector ocupa aproximadamente a 200 personas.
En base a proyectos financiados primero por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), el Ministerio de Industria Energía y Minería, el Centro de Emprendedurismo Industrial (CEI), la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), la Intendencia de Rivera, ANEP, UdelaR y el Claeh, desde 2016 y ahora con Fondo de Desarrollo Territorial cofinanciado por el Congreso de Intendentes, ANDE y la Unión Europea, Redema se expandió hacia Tacuarembó y Cerro Largo.
Al mismo tiempo, se sumó el LATU, a través del Proyecto Fortalecimiento del Desarrollo Territorial, con “capacitaciones a técnicos para que brinden servicios a las empresas. Eso se inició en 2019 en las áreas de arroz y forestación en Cerro Largo y después se expandió la idea en otras capacitaciones”, destacó.
En tanto, “este año se instaló el modelo de secador solar, que está en LATU en Montevideo, en el Campus Auxiliar de la UTU de Tacuarembó, realizado en madera, y la semana pasada se terminó de armar en la sede del Polo Tecnológico de Rivera, con la colaboración de la cooperación japonesa JICA. Este último será manejado por los estudiantes y los docentes del Tecnólogo de Madera y en Tacuarembó lo hacen entre la Universidad y el Polo Tecnológico”, explicó.
“La idea –puntualizó– es que sea un modelo para trabajar el secado de madera, uno de los cuellos de botella de los pequeños aserraderos, empleando esta técnica que utiliza la energía solar. En Tacuarembó ya se hizo la capacitación a los empresarios de Pymes y a los estudiantes y acá en Rivera se va a hacer en marzo”.
“Entonces no sólo existen las carreras, sino que hay una fuerte vinculación con el medio. También para realizar las pasantías, esta carrera tiene convenios con empresas exportadoras e instituciones del medio”, apuntó la profesional. Un aspecto a destacar es que el primer estudiante titulado en Tecnólogo en Madera es una mujer, quien actualmente es la coordinadora de la carrera. La encargada del Laboratorio de la Madera, también es titulada en esta carrera, de la cual han egresado hasta el momento 6 estudiantes, a los que se sumarán este año 4 más que ahora están haciendo sus pasantías.
“POSIBILITA LA AUTOGESTIÓN”
“La amplitud de la carrera va más allá de decir que los estudiantes se pueden insertar en una gran empresa forestal, porque posibilita la autogestión, o sea que los propios estudiantes tengan su empresa de servicios. De hecho, hay estudiantes que tienen empresas de servicios que hacen podas, raleos, etc”.
A la vez, “habilita a que tengan consultoría de servicios, porque junto con UTEC hay un área de emprendedurismo y un co-work donde los estudiantes, tanto de UTU, UTEC o la Universidad de la República, con el apoyo de los docentes pueden realizar sus proyectos. Hay fondos para que los estudiantes puedan presentar proyectos tanto de emprendedurismo como de investigación.
Algunos empiezan por la modalidad de investigación y después pueden migrar a modalidades emprendedoras con esos fondos disponibles”, consignó.
“En Rivera en esta modalidad de Campus hay un espacio de co-work en UTEC”, agregó.
“CARRERAS TRANSVERSALES”
Continuando con las opciones en materia educativa, la docente refirió que, en Rivera, la UTEC y UTU tienen la carrera “Tecnólogo en Mecatrónica, que tiene que ver con toda la implementación de la robótica”. La carrera Ingeniero en Logística, es otra opción con un título intermedio que es Tecnólogo en Logística. “Esas son carreras transversales para cualquier área industrial”, especificó, acotando que “también participan de la red de desarrollo maderero”’, principalmente Tecnólogo en Mecatrónica.
Esta red funciona como nexo entre las instituciones, las organizaciones de enseñanza y las empresas, tanto pequeñas o medianas, pero también las grandes, con necesidad de capacitar a gente del área y servicios anexos para que tengan mejor formación. Es una base, una plataforma para bajar cosas a territorio que tengan que ver con las necesidades sectoriales, se hace como un link entre cosas que antes estaban separadas. Especialmente con las pequeñas empresas que les cuesta mucho llegar a la academia, entonces, la red es ese nexo”, apuntó.
CARRERAS DE LA UdelaR
Una de las carreras más incipientes de la Universidad de la República es la de Ingeniería Forestal, que tiene una duración de 5 años, se dicta en Tacuarembó y a la fecha hay tres egresados.
La carrera de Agronomía tiene la línea Forestal en 4º y 5º, la más clásica, se dicta en Montevideo y el título es Ingeniero Agrónomo orientación Forestal.
En Maldonado en el Cenur del Este (CURE) se dicta la Licenciatura en Paisajismo, que depende de la Facultad de Agronomía y de Arquitectura y trabaja gente también en el área forestal por el tema de los árboles en el paisaje. “Es bien interesante porque ahora, por ejemplo, en esta modalidad de Campus que tenemos en Rivera y Tacuarembó, hay un territorio que necesita todo un tema de urbanismo y gestión del paisaje. Se está haciendo un convenio entre la sede Rivera Cenur Noreste y la Licenciatura en Paisajismo para que los estudiantes hagan todo el diseño en referencia al paisaje. A la Intendencia de Rivera le interesó mucho la idea, igual que a UTEC, entonces quieren ampliar todo ese trabajo con la Licenciatura en Paisajismo, subrayó.
ORIENTACIONES
La docente proporcionó información ilustrativa de las orientaciones internas que ofrece cada carrera.
“El Tecnólogo en Madera tiene una orientación en Tecnología de la Madera, que es para trabajar en planta industrial, remanufacura, aserrado, en la industria; en Secado y Energía, porque en Uruguay, al tener un mercado interno pequeño la madera se exporta y para ello debe estar seca –todas las empresas exportadoras tienen hornos de secado–. Esta última orientación implica la transferencia de calor y masa aire-agua, para secar madera. A la vez, como hay muchos residuos forestales, todas las empresas tienen plantas de cogeneración de energía eléctrica y de vapor; tienen calderas donde se genera gas a partir de la combustión de la madera –aserrín o chip– y eso mueve una turbina que genera energía eléctrica que se vende a UTE. En Rivera hay 2 plantas y en Tacuarembó hay otras dos, que generan vapor para su propio secado o para el frigorífico, y además generan energía para la propia industria y el excedente se vende a UTE. Entonces el Tecnólogo en Madera tiene un eje en esa área. Otra orientación es en Gestión de la Producción que abarca logística, control de stock, manejo de tiempos y métodos, administración, habilidades transversales”, detalló.
En la carrera de Ingeniero Forestal, “al ser muy incipiente todavía no se han definido ejes y tiene mucho que ver con las áreas de investigación donde trabajan los docentes. Las áreas son: Entomología Forestal, Ecología Forestal (manejo de los árboles en las podas, los raleos, como se maneja el crecimiento), Cosecha, Investigación en materiales y en Tecnología de la Madera, Fisiología, Dendrocronología (trabaja con los anillos de crecimiento para detectar variaciones de crecimiento, comportamientos con relación al manejo y la relación con el clima) y área de Secado y Energía. Se está trabajando en agregar el área de Patología (hongos de la madera y enfermedades forestales”, concluyó.
Forestación ocupa 6,21% de superficie total del país
En Uruguay hay una superficie forestada de 1.048.228 de hectáreas efectivas y 38.881 hectáreas cosechadas (período enero-febrero 2021), lo que totaliza 1.087.109 hectáreas efectivas destinadas al uso forestal, un 6,21% de la superficie total del país. Así se desprende de la información presentada en la Cartografía Nacional Forestal 2021 elaborada por la División Evaluación e Información (DEI) de la Dirección General Forestal (DGF) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP).
Según establece el documento, sobre una superficie total de 17.502.000 ha, a las 1.087.109 ha de bosque plantado (6,21%), se le suman 835.349 ha (4,77%) de bosque nativo (2016), lo que hace un total de bosques de 1.922.458 ha (10,98%).
NUEVAS ÁREAS POR DEPARTAMENTO
En el desglose de datos de las nuevas áreas plantadas por departamento, para el período diciembre 2017- febrero 2021, en el total del país se forestaron 44.058 ha, de las cuales 956 corresponden a Paysandú.
En tanto, para el resto del país las superficies son las siguientes: Canelones, 1.485; Cerro Largo, 1.485; Colonia, 467; Durazno, 14.093; Flores, 3.786; Florida, 2.085; Lavalleja, 3.168; Maldonado, 420; Río Negro, 1.886; Rivera, 1.433; Rocha, 1.800; San José, 479; Soriano, 2.269; Tacuarembó, 9.705 y Treinta y Tres, 1.613.
