Una menor de 9 años continúa internada por haber sufrido una herida de bala cuando llegaba a su casa, ubicada en barrio P-3, donde según los vecinos a la noche es “tierra de nadie”. De acuerdo a datos recogidos por EL TELEGRAFO, se trató de una situación fortuita, ya que la bala perdida correspondía a un desorden protagonizado por integrantes de dos familias. En tanto, en la víspera el autor del disparo –de 35 años– se presentó ante la Policía y fue condenado a 2 años y 6 meses de prisión efectiva.
Cerca de la 1.30 del lunes mediante llamado al 911 se informó de una niña herida. Personal policial acudió a Antonio Estefanell entre Treinta y Tres Orientales y Setembrino Pereda, desde donde informaron sobre un desorden generalizado y había un lesionado. Una vez allí, se le brindó atención a la pequeña, trasladándola de urgencia hacia el hospital Escuela del Litoral.
De las averiguaciones efectuadas por la Policía surgió el dato de que la contienda había sido entre dos familias rivales y que la niña no tenía nada que ver con ese entorno. Así, se supo que momentos antes la menor había llegado a su casa junto a su familia, retornando de un paseo en Las Cañas, y estaba en el frente mientras sus padres bajaban las pertenencias del automóvil. En ese momento, cuando ocurría la pelea a unos metros, se escuchó disparo y la niña sintió un ardor en su brazo por lo que de inmediato sus padres notaron que se trataba de una herida de bala.
Mientras era trasladada por un móvil policial para su asistencia, otros efectivos realizaron sendas recorridas por la zona a fin de identificar al autor del disparo pero con resultado negativo.
PIDIÓ PRESTADO EL AUTO
Contando con varios elementos, la Policía supo que el responsable del hecho se desplazaba en un automóvil Fiat blanco, por lo que centraron la búsqueda en la zona a fin de poder aclarar la situación.
Al día siguiente, tal como informara EL TELEGRAFO en su portada de ayer, personal del Grupo de Respuesta Táctico vio un automóvil con similares características saliendo del citado barrio y tomando por calle Antonio Estefanell al Este. Le dieron seguimiento y a unos 20 metros del cruce con Dr. Roldán le indicaron al conductor que detuviera la marcha. Fue identificado como un hombre poseedor de antecedentes, que hace tres meses recuperó la libertad.
Al efectuar una inspección en al automóvil, encontraron que llevaba al menos 12 gramos de una sustancia blanca similar a la cocaína y una balanza de precisión, por lo que el caso fue derivado a la Brigada Departamental Antidrogas. Mientras la Policía realizaba el reactivo para determinar si se trataba de cocaína, el hombre indicó que no sabía nada y solo le había pedido prestado el auto a un primo.
SE PRESENTÓ SOLO
Conforme el paso de las horas, en la tarde de la víspera Gustavo Daniel Rojas Luján –poseedor de antecedentes penales por rapiña, tenencia de estupefacientes, porte y disparos de arma de fuego– se presentó ante la Policía y admitió haber sido el autor del disparo que hirió a la niña y el propietario del auto y la droga incautada la noche anterior. En su declaración habría manifestado que el disparo iba dirigido a un vecino a quien quería amedrentar, pero el efectuarlo el proyectil impactó en una columna y rebotó, lesionando la menor.
Elevadas las actuaciones a Fiscalía de Feria, en la órbita penal se dispuso la formalización de la investigación para Rojas Luján, quien resultó imputado y condenado por “un delito de lesiones personales agravadas por el uso de arma de fuego, con un delito de porte de arma y un delito de negociación de estupefacientes”, imponiéndole la pena de 2 años y 6 meses de prisión efectiva.
