La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) realizó un balance y presentación de los nuevos Centros Educativos María Espínola 2022, en el marco de la transformación educativa. En su primer año, la propuesta registra una mejora en la promoción de los estudiantes de Secundaria y UTU.
El presidente del Codicen, Robert Silva, destacó que “la propuesta no arrojó por tierra todos los avances y constataciones que en buena medida se produjeron en la educación anteriormente. Sabemos que hay cosas para cambiar, pero reconocemos que hay otras que están muy bien”.
Asimismo, anunció que “en los centros María Espínola la promoción mejoró pasando de 78,9% en 2020, a 81% en 2021”.
Los Centros María Espínola se sustentan en tres pilares fundamentales: la extensión del tiempo pedagógico con ocho horas de permanencia en el centro educativo –que incluye la realización de talleres extracurriculares, el trabajo en proyectos y la alimentación–; el rol de las figuras educativas –facilitador, coordinador de enseñanza, coordinador de actividades y participación, y profesor de tecnología e innovación–; y la participación activa de la comunidad y de las familias.
Cabe destacar que estos centros promueven una política que está focalizada en la Educación Media Básica diseñada para mejorar los aprendizajes, el trayecto y el egreso de los estudiantes en situación de vulnerabilidad educativa y social.
REDUCIR LA INEQUIDAD
Uno de los principales objetivos de los Centros María Espínola es reducir la inequidad interna del sistema educativo, en donde el 78 por ciento de los estudiantes que están en una situación social más favorecida termina el ciclo educativo secundario, en tanto que solo el 18 por ciento del quintil social menos favorecido logra este cometido.
Según los datos que se emiten de la encuesta realizada a docentes de los Centros María Espínola, el 80 por ciento considera que la formación brindada es “adecuada y pertinente”, de acuerdo a los requerimientos educativos de la actualidad.
Asimismo, el 51 por ciento de los educadores cataloga como positivo el aprendizaje basado en proyectos que lleva adelante esta iniciativa, y el 59 por ciento dijo haber trabajado en duplas tecnológicas.
El 80% de los profesores consultados en tanto, indicó que dichos centros incidieron de manera positiva en la convivencia y el clima institucional de los centros educativos.
Por su parte, el 91% de los encuestados está de acuerdo con que el centro oriente su accionar hacia la personalización de la enseñanza, apelando a diferentes estrategias; mientras que el 74% de los docentes está convencido de que se puede mejorar y concretar las metas propuestas. En tanto que las comunidades educativas destacan la incorporación de la alimentación en estos centros, debido a que entienden que favorece el desarrollo integral de los estudiantes, contribuye a generar mejores condiciones para el aprendizaje, estimula las pautas de convivencia, prácticas saludables y hábitos de higiene.