Cuáles fueron los motivos por los que Paysandú se quedó sin un torneo internacional Sub 20

Fue el 13 de agosto. El director de selecciones nacionales llegó para brindar su informe.

La idea primaria fue Maldonado. Es cierto. Pero Paysandú estuvo ahí, muy cerca de poder recibir el torneo internacional Sub 20 que fue anunciado hace pocos días para disputarse del 6 al 10 de setiembre en Maldonado.

El torneo servirá como preparación para el Sudamericano del próximo año, y servirá sin dudas para los dirigidos por Marcelo Broli de cara al futuro.
Del cuadrangular formarán parte lógicamente el dueño de casa, Uruguay, así como Argentina, Brasil y Uzbekistán.
El 6 de setiembre a las 21 horas se abrirá la competencia con el partido entre Uruguay y Uzbekistán, el 8 los celestes enfrentarán a Brasil y el 10 a Argentina, siempre teniendo como escenario al Estadio Domingo Burgueño.

Pudo venir a Paysandú

El torneo pudo llegar a Paysandú. No puede decirse que estuvo cerca, que sí que el Estadio Artigas estuvo en carpeta para recibir a la actividad.
¿Qué fue lo que pasó? ¿Por qué finalmente el torneo se confirmó en Maldonado y no en nuestra ciudad? La clave, pese a lo que podría pensarse, no fue el Estadio Artigas sino la falta de infraestructura deportiva de la ciudad.

EL TELEGRAFO fue testigo de la visita del director de las selecciones nacionales, Jorge Giordano, al Estadio Artigas.
El entrenador llegó a nuestra ciudad con el objetivo de observar las instalaciones del máximo escenario deportivo de nuestra ciudad. Lo recorrió junto al director de Deportes Guillermo Arias, se intercambiaron opiniones y la realidad es que el Estadio Artigas, más allá de sus conocidas falencias, pasaba la prueba.
Pero Giordano recorrió no solo el Estadio Artigas, sino también la hotelería y posibles lugares de entrenamiento.

Y ahí pecó el fútbol sanducero. La visita a los posibles lugares para alojar a las delegaciones no obtuvieron el resultado del todo esperado, aunque en un momento se barajó hasta la posibilidad de que Argentina pudiera hacer su base de operaciones en la vecina ciudad de Colón.
Pero el gran problema, el filtro final, tampoco fue la hotelería, sino el no encontrar escenarios alternativos al Estadio Artigas para que los cuatro seleccionados pudieran entrenar.

No hay canchas alternativas

La realidad es que hoy ninguna cancha está en condiciones de poder recibir a una selección de ese nivel para trabajar durante algunos días en nuestra ciudad.
“Es difícil encontrar la infraestructura necesaria en el Interior para poder desarrollar este tipo de torneos. Imaginate que Argentina y Brasil Sub 20 son totalmente profesionales”, señaló luego de la recorrida Giordano a EL TELEGRAFO.

La realidad es que la visita a los posibles lugares de entrenamiento no pasaron la prueba. Estuvieron lejos.
Paysandú no pudo superar la prueba y se perdió la chance de recibir un torneo internacional Sub 20 que habría puesto otra vez a nuestra ciudad en el mapa deportivo ya no solo sudamericano, pero finalmente el informe fue negativo.

No hay un escenario con una cancha en buenas condiciones y tampoco las comodidades necesarias para poner a disposición a este nivel.
La situación puso un tema sobre la mesa y es la infraestructura deportiva más allá de la municipal.

El Estadio Artigas, cuya realidad es conocida por todos, será remodelado y se espera que este año comiencen las obras que aguardan desde hace varias administraciones.
Pero sería necesario también que en este caso el fútbol sanducero pusiera manos a la obra en mejorar terrenos de juego, sus escenarios y comodidades. Primero en beneficio propio, y después pensando en que este tipo de situaciones no deberían volver a suceder. No es fácil, pero seguramente existen mecanismos para comenzar a trabajar en ello.
Para no conformarse solo con la visita de un partido por el Campeonato Uruguayo, o con el partido amistoso que seguramente en unos meses jugarían Uruguay y Perú en Sub 15.
Para, en todo caso, comenzar a pensar un poquito más en grande más allá de la actividad doméstica, que también se vería beneficiada.