El secretario general de la Junta Nacional de Drogas (JND), Daniel Radío, recorre los dispositivos de atención a los usuarios con consumo problemático de sustancias y se reúne con técnicos a fin de evaluar la marcha de los programas. En Paysandú funciona el dispositivo Ciudadela, donde aclaró que “no están tan mal los números de atención. No me refiero en términos de consumo porque no tengo datos y no lo puedo saber. Pero después de Montevideo, están Salto y Paysandú”, aclaró.
La JND resolverá la venta en las farmacias de una nueva variedad de marihuana recreativa con mayor porcentaje de efecto sicoactivo o THC. En los clubes cannábicos supera el 20% y en las farmacias tiene hasta 9%. Además, presentará una iniciativa para habilitar a los extranjeros no residentes al consumo de cannabis.
Derogar
En julio, Cabildo Abierto planteó a la coalición la derogación de la Ley 19.172, de regulación y control del cannabis. El cabildante Álvaro Perrone cuestionó las razones por las cuales hay que continuar con la iniciativa vigente, si en su momento “ningún blanco votó la ley de regulación del cannabis”.
“Me merece la mejor opinión el reclamo de los legisladores de Cabildo Abierto porque son un sector representativo de nuestra sociedad que pide eso. Además, son críticos de mi gestión y me lo dicen en la cara. No estoy de acuerdo y creo que mayoritariamente los uruguayos no estamos de acuerdo. Ahora soy el secretario de la JND y voy a tratar de mejorar la ley y no derogarla”, dijo Radío a EL TELEGRAFO.
Reconoció que “la ley tiene algunos problemas y otros aspectos que no comparto, por ejemplo el registro de los usuarios. En Uruguay puedo tomar alcohol hasta el coma y nadie pide que me registre y no me estoy haciendo un bien para la salud. Puedo fumar tres cajillas de cigarrillos por día y nadie pide mi registro. Ahora, si quiero dar una pitada a un porro tengo que estar registrado. Es contradictorio. Asumo que no tengo consenso mayoritario y por eso no lo planteo”.
Residentes y no residentes
La ley establece “una inequidad de derechos y es que los ciudadanos uruguayos y los extranjeros residentes pueden usar cannabis, pero los no residentes pueden mirar a los otros y no pueden fumar. Corregir esa inequidad quiere decir que cualquiera en este territorio, mayor de edad, pueda usar cannabis. Me dicen que quiero el turismo canábico, pero si voy a otro país y tomo un vaso de vino, nadie dice que hago turismo alcohólico. No es mi papel la promoción del turismo, lo que digo como organismo rector es que no me parece que exista esa inequidad”.
Combate al narco
Con la vigencia de la citada ley, “se dijo que se iba a combatir el narcotráfico, que sigue tan campante. No creo eso, porque el centro de gravedad no tiene que estar puesto en el narcotráfico sino en los derechos de las personas”.
Según Radío, “las personas tienen derecho a usar cannabis sin vincularse con organizaciones criminales y a ese derecho debemos protegerlo. Si alguien decide su consumo, que no tenga que andar circulando su número de teléfono entre organizaciones mafiosas y pueda ir a la farmacia o plantarlo en su casa”.
El secretario de la Junta señaló que cuando anuncia “que aumentar el porcentaje de THC porque a los usuarios no les gusta, se escandalizan. En Uruguay hay 28 farmacias y cuando asumí había 14. Vengo de Canadá donde hay más de 1.500 puestos de venta”.
En el año 2017, varias farmacias que vendían marihuana al público fueron intimadas por sus bancos a que cierren sus respectivas cuentas. Ocurrió con bancos internacionales que cuentan con corresponsalías en varios países del mundo.
“El mismo banco que en Uruguay no le permite a las farmacias tener una cuenta bancaria si venden cannabis, a mi me dio una tarjeta de crédito en Canadá con la que, si yo quería, podía comprar cannabis. Eso tiene que ver con la magnitud del mercado uruguayo y es que los corresponsales bancarios no están dispuestos a correr riesgos en un país donde el mercado es chico”.
Uso medicinal
Próximamente reglamentarán la ley de acceso al cannabis medicinal, que fuera oportunamente aprobada. “Venimos retrasados pero algunas cosas no nos pasan a nosotros, sino al planeta. El prohibicionismo nos generó una deuda en términos de investigación clínica. Casi todos conocemos algunos elementos empíricos que nos demuestran que el cannabis es bueno para usarlo en algunas patologías, pero no hay suficientes investigaciones clínicas porque estuvo prohibida”.
En 2019, el país aprobó una ley de acceso al cannabis medicinal que nunca se reglamentó. “La buena noticia es que proximamente la reglamentaremos. No es su totalidad, pero daremos un paso. El año pasado liberamos la exportación de algunas cosas del cannabis trancadas por dificultades normativas y ahora plantearemos para el uso medicinal y vamos a reconocer los productos farmacológico y vegetales. O la posibilidad de utilizar fórmulas magistrales que se vendan con químicos farmacéuticos. El ingeniero químico Carlos Lacava está al frente de este programa y vamos a tener noticias sobre este tema”.
