“Esta Rendición de Cuentas fue distinta a las anteriores por varios motivos”, dijo a EL TELEGRAFO el diputado Conrado Rodríguez, del Partido Colorado. “Primero porque implicó un incremento presupuestal de 226 millones de dólares, que es muy importante. Hacía muchos años que no se veía un incremento de esta magnitud, si bien en 2015 en la Ley de Presupuesto se habían establecido aumentos que estaban incluso por encima de los 226 millones de dolares”, expresó y explicó que “lo que sucedió en 2016 fue que como no se pudieron financiar porque no se estaban cumpliendo las proyecciones de crecimiento que había fijado (el entonces ministro de Economía Danilo) Astori, lo que se hizo fue una ajuste fiscal, especialmente la suba de la tasa del IRPF e IASS. También el abatimiento de partidas incrementales y la postergación de partidas hacia el siguiente año, porque no se podían financiar entonces. Por eso el aumento en esta Rendición de Cuentas es uno muy importante”.
PROFESIONALES SEGUIRÁN PAGANDO ADICIONAL
Más allá que hubo reasignaciones importantes para algunos sectores, una de las propuestas de Rodríguez no pudo concretarse al no ser votada por Cabildo Abierto y tres representantes colorados de Ciudadanos, entre ellos el de Paysandú Juan Carlos Moreno.
Para Rodríguez “hubo un acuerdo no cumplido”, como “era la derogación del adicional del Fondo de Solidaridad, no se cumplió”. En 2017 y 2018 el diputado por Batllistas había presentado la iniciativa en las respectivas Rendiciones de Cuentas, pero “no fue aprobada. Como la impulsamos cuando eramos oposición, con mucho más razón y coherencia lo teníamos que presentar ahora cuando integramos el gobierno. No lo presentamos el año pasado porque no había recursos. Ahora la situación es diferente”.
Explicó el diputado por Montevideo que “si bien Ciudadanos había acordado en la comisión (votar la derogación), estos tres diputados no la integraban y tomaron otro camino. Para mí era clave derogar este impuesto por varias razones, especialmente porque es un clamor de los profesionales universitarios. De hecho el Ministerio de Economía estuvo de acuerdo con la derogación del impuesto que había sido creado de manera transitoria en 2001 para poder darle un incremento a la universidad y que luego nunca se quitó”.
“Lo transitorio quedó como definitivo y termina siendo una pesada carga para muchos profesionales. Porque si bien muchos de ellos tienen un buen pasar, un buen ingreso, por otro lado hay muchísimos que no, a quienes les cuesta enormemente poder cumplir con sus obligaciones de todos los meses, porque hay meses que facturan y otros que no, que no tienen trabajo. Y aún así tienen que pagar la Caja de Profesionales universitarios, el Fondo de Solidaridad, el adicional de solidaridad y los otros impuestos que también pagan”, explicó.
Por esa razón, el diputado colorado resalta que “además del reclamo de los profesionales tenemos en cuenta la reforma de la seguridad social y sobre todo la reforma de la Caja de Profesionales, que es una reforma que urge, porque está prácticamente en bancarrota. De hecho el Poder Ejecutivo está pensando en la posibilidad de aumentar los aportes de los activos y de los pasivos, para poder salvar a la Caja de Profesionales. En ese marco, si nosotros no damos una señal para alivianar la carga a los profesionales, realmente es muy dificultoso luego afrontar la reforma, pidiéndole un nuevo esfuerzo a los profesionales”.
“Por eso, ¿con qué cara vamos a solicitarle un esfuerzo extra a los profesionales sino estuvimos dispuestos a alivianar la carga que tienen?”, pregunta el diputado.
DESENCUENTROS EN LA MANERA DE FINANCIACIÓN
La principal dificultad para que tres diputados de Ciudadanos (entre ellos Juan Carlos Moreno) y Cabildo Abierto no acompañaran el proyecto, fue determinar la fuente de financiamiento para sustituir lo que dejaba de percibir la universidad por el pago del adicional del Fondo de Solidaridad. “Propusimos como fuente de financiamiento el Fondes, que se nutre del 30% de las utilidades del Banco República, que es una una cifra importante de alrededor de 100 millones de dólares. Lo que se requiere es solamente 3.250.000 dólares”.
Pero “esa fuente de financiamiento finalmente no fue acompañada por algunos partidos en la comisión. Otros legisladores propusieron tomarlo del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), considerando su situación patrimonial. Tiene 20 millones de dólares en caja, más 15 millones de dólares en plazo fijo, más un ingreso constante de 1.500 millones de pesos, así como una escala remunerativa que es de las más altas de toda la Administración”.
“De nuevo hubo disconformidad de algunos diputados, por lo que volví a hacer hincapié en el Fondes como fuente de financiamiento. Se dijo que podría haber un problema si el BROU no tenía utilidades, cosa que no ha sucedido. Pero para resguardar esa situación en el plenario le agregamos un inciso por el cual si BROU no tuviera utilidades se le facultaba al Ministerio de Economía y Finanzas a adelantarle el dinero a la Universidad de la República, para que pudiera tener ese ingreso y cuando hubiera utilidades, el MEC se compensara”, informó más adelante Conrado Rodríguez.
“Pero, pese a todo eso, lamentablemente hubo tres diputados de nuestro partido que no acompañaron. No se respetó el acuerdo llegado en la comisión de buscar un equilibrio entre la eliminación de un impuesto, a mi juicio injusto, y además inconstitucional y la sustitución de fondos para que la universidad no perdiera”, resaltó.
“La mayoría de la bancada acompañó pero tres diputados de Ciudadanos, no. Tendrán que dar sus explicaciones, pero más allá de esta situación creo que dimos una pelea importante. Pusimos el tema arriba de la mesa. No todo está perdido porque ahora el tema puede ser retomado por el Senado. Vamos a trabajar para que el Senado asuma esta temática a través de los senadores de nuestro partido, para que pueda ser aprobado”, concluyó el diputado por el Partido Colorado Conrado Rodríguez.
