Demasiado entretenidos

La que estamos cerrando hoy ha sido una semana sumamente ajetreada en el plano nacional, especialmente con algunos hechos que han generado inquietud en el gobierno y que han puesto en evidencia diferencias entre figuras de diferentes partidos que integran la coalición de gobierno. Claro, el gran tema del jefe de la custodia presidencial, con todas sus repercusiones, opaca otros asuntos también preocupantes a la interna gubernamental, como por ejemplo el cruce que vienen protagonizado el subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio, y el exdirector general de esa cartera, Martín Pérez Banchero.
La cartera parece no poder terminar de cerrar la fase de polémica que comenzó con la renuncia del exministro Germán Cardoso, quien está afrontando un proceso judicial.
En los últimos días Monzeglio anunció que denunciará a Pérez, debido a que este le acusó de estar al tanto de todas las maniobras por las cuales ahora Cardoso es investigado por la Fiscalía y no reconocerlo cuando fue llamado a declarar.
El abogado Andrés Ojeda es quien se encarga de la defensa de Monzeglio y reúne pruebas para llevar adelante una acusación que posiblemente se encuadre en difamación e injurias. “Este tipo de asuntos los tiene que dirimir la Justicia; no estoy para la chiquita”, dijo al respecto el subsecretario.
Pérez Banchero también denunció que Monzeglio es “una máquina de cobrar viáticos”, en relación a sus frecuentes viajes a Punta del Este. Esta semana también trascendieron algunos números al respecto, por ejemplo el portal Montevideo.com.uy publicó que entre marzo de 2020 y de agosto de 2021 el subsecretario recibió de parte del Ministerio de Turismo $ 322.679 por concepto de viáticos. De ellos la mayoría, el 51%, $165.869, tuvo como destino a Punta del Este.
Monzeglio justificó el uso de estos viáticos en que su función “es estar con los operadores” y expresó que concurrir a supervisar la oficina de turismo de Punta del Este durante el fin de semana se justifica porque “es cuando hay gente”. Agregó que muchas veces paga el viático que le da la cartera ($1.950) y abona la diferencia de su bolsillo: “Con $1.950 pesos no puedo ni entrar al hotel. Yo no bajo de un cierto nivel, porque obviamente lo pago yo”, expresó.
Venimos, por otra parte, de que recientemente, a comienzos de este mes, el fiscal de Delitos Económicos y Complejos de 3º turno, Gilberto Rodríguez, formalizara la creación de dos carpetas de investigación sobre Daniel Reta y Elbio Rodríguez, quienes fueron asesores de Cardoso, en la causa que busca determinar si existieron delitos en las compras directas y contrataciones de publicidad en la cartera durante la breve gestión del exministro, hoy diputado por Maldonado. El efecto de esta determinación es que el fiscal continuará la investigación en carácter de indagados sobre ambos exasesores, quienes hasta ahora habían comparecido en calidad de testigos.
Entre las cosas que se investigan en esta causa está la contratación de una empresa de origen estonio, Kirma Services, por 280.000 dólares, empresa que fue presentada por el Elbio Rodríguez, “asesor honorario” del entonces ministro.
Pérez Banchero también había señalado que hubo pedidos irregulares de habilitaciones durante la pandemia, en especial hay una de un hotel del hijo de Gustavo Torena –“el Pato Celeste”– en Punta Colorada. También denunció que hubo funcionarios que fueron removidos de sus cargos por denunciar las irregularidades del exministro Germán Cardoso y a día de hoy siguen sin ser restituidos a sus puestos.
En fin, que estas acusaciones, idas a la Justicia y el largo etcétera de cosas que vienen ocurriendo, terminan siendo un motivo de distracción para la Cartera, que ha tenido la responsabilidad de acompañar la recomposición de un sector que fue de los que más sufrió las consecuencias de la pandemia, sino el que más. Es decir, hay un ministro nuevo, Tabaré Viera, que en medio de todo este panorama debe tratar de sacar adelante el ministerio y trazar las políticas en la materia, políticas para hoy y planificación, en un momento clave, porque de lo que se decida hoy depende cómo nos posicionamos hacia el futuro. Y cabe recordar que Viera no es precisamente un hombre que venga del sector turístico sino que se trata de alguien que viene precedido de antecedentes de buen administrador y que a todas luces fue puesto allí, con buen criterio, para poner orden.
En el medio puede que se pierdan algunas oportunidades, como aconteció en esta región y su denominación Pájaros Pintados –por decisión de Cardoso y Monzeglio–, que tanto se trabajó y se invirtió en el territorio para su posicionamiento para que luego, sin más, simplemente desaparezca sin dejar rastro a cambio de otra denominación que sí, hace justicia con el principal atractivo turístico litoraleño, pero que olvida todo lo demás. Quedan vigentes algunos productos desarrollados por operadores locales que demuestran que aquella política era acertada, como el caso reciente de Luna llena en el palmar, un evento que cada vez convoca más público en la región y que es un producto que no se relaciona directamente con la propuesta termal, sino que la complementa. Y no por casualidad es que el millonario norteamericano Gilbert Butler haya decidido apoyar el ecoturismo en los Esteros de Farrapos comprando islas, estableciendo escuelas de canotaje en Nuevo Berlín y San Javier y construyendo estaciones de kayakismo en el río Uruguay, justo en el corazón de lo que fue el desaparecido programa Pájaros Pintados.
Pero claro, qué más se le puede pedir al pobre Viera que mantener el barco a flote en medio de tanta inestabilidad. ¡Como para planificar políticas turísticas a largo plazo está el panorama!