Se terminó el baile

Croacia eliminó a Brasil y se transformó en el primer semifinalista, tras empatar 0 a 0 en tiempo reglamentario y 1 a 1 en el alargue, el equipo croata se impuso por 4 a 2 en los penales marcando historia en esta sorprendente Copa del Mundo.
Los planteos de uno y otro equipo eran claros, Brasil proponiendo como lo manda su ADN futbolístico, y Croacia esperando e intentando contragolpear con claridad para no romper sus líneas defensivas.
La primera oportunidad fue para Brasil en el minuto cuatro, pase profundo a Vinicius que remató, rebotó en un defensa y en el segundo intento contuvo Livakovic, uno de los mejores arqueros del Mundial.
La respuesta croata llegó a las 12’ con un envío al área de Becker pero ni Perisic ni Juranovic pudieron conectar con el balón. Brasil se adueñó de la pelota, comenzó hacerla circular, manejando los tiempos y el ritmo del partido, mientras Croacia esperaba replegado.
En el complemento el joven Livakovic salvó la caída de su valla por dos, primero a Neymar tras ejecución en el área chica y poco después le ahogó un mano a mano a Vinicius, que fue el más claro en el conjunto brasileño en los últimos metros.
Brasil más punzante en la segunda parte, mantuvo el ritmo vertiginoso en zona de ataque, pero la zona defensiva croata junto a su arquero continuó segura. Neymar y Paquetá, pudieron abrir el marcador, pero la historia continuaba incambiada. Y se fueron al alargue.
La primera situación clara del alargue fue para Croacia. Petkovic escapó de dos defensas con gran gesto técnico, ingresó al área y mandó al medio, pero la definición de Brozovic se fue lejos y arriba.
En la respuesta Neymar, brillante, hizo una doble pared, escapó del golero y definió su propia jugada para poner el 1 a 0, y hasta allí, clasificación. Era golazo y pasaje.
A Croacia le quedarían solo 15’ para igualar y llevar el partido a los penales, o volver a casa.
Y con gran jugada colectiva desde el medio campo, velocidad, balón al medio y Petkovic, merecido, puso el empate y era tiempo de penales.
Croacia nuevamente se hizo fuerte desde los 12 pasos convirtiendo los cuatro penales ejecutados, sobre los dos convertidos por Casemiro y Pedro, sellando su pasaje a semifinales, por segunda vez consecutiva.
Brasil, el gran candidato, se vuelve a casa. Se gastó los goles y los bailes de festejo ante un equipo que dejó en claro a lo largo de su participación que no luce, pero es durísimo.
Por eso era clave para los brasileños alcanzar la victoria en los 90 minutos. Porque Croacia, que venía cansada, estaba decidida a no dar nada por perdido. Y si lograba llevar el partido al alargue, sería todo corazón ante un rival que comenzaría a sentir la situación.
Neymar anotó un golazo, pero Croacia no bajó los brazos. Batallón hasta el final y llevó su juego a lo que parece más le gusta: los penales.