En la sede de la Dirección General de Desarrollo Rural del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), fue presentada la 2ª edición de Senda Agroecológica, convocatoria dirigida a las organizaciones de la producción agropecuaria a presentar propuestas de transición agroecológica.
La política es implementada por la DGDR, y cuenta con el apoyo técnico del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y la Comisión Honoraria del Plan Nacional de Agroecología (Chpna) y tiene financiamiento del Banco Mundial. El plazo de formulación de las propuestas es del 15 de setiembre al 25 de octubre de 2023. Para acceder a bases y formulario ingresar a www.gub.uy/mgap/dgdr llamados vigentes.
El MGAP tiene entre sus prioridades estratégicas la promoción de procesos de transición hacia la agroecología en la producción agropecuaria nacional. Entendiendo la agroecología como la aplicación sistemática de ciencia ecológica a la práctica agronómica. Y el concepto de transiciones agroecológicas como el rediseño gradual hacia sistemas de producción diversificados y resilientes, que incluyan variables de captura de carbono y reducción de emisiones, que mejoren la calidad de suelos y aguas, así como la biodiversidad de los sistemas.
El director de Desarrollo Rural del MGAP, Carlos Rydström, manifestó que “es una instancia muy importante para nosotros volver a trabajar en este proyecto, buque insignia de las políticas que estamos trabajando con el Banco Mundial y como entendemos que deben diseñarse y ejecutarse las políticas de extensión focalizadas en la agricultura familiar. En particular en este caso las transiciones agroecológicas, las prácticas agronómicas que se pretenden fomentar, incluyendo ese enfoque trasversal que tratamos de fomentar, como son la perspectiva de género, el involucramiento de las nuevas generaciones, y la capacidad de fortalecer las organizaciones de productores, como un medio para mayor competencia, mayor escala y mayor prosperidad en líneas generales”.
Destacó el proceso con “las organizaciones registradas como ATDR, con las que hemos venido trabajando para el plan de contingencia alimentaria, que llevamos a cabo estos meses; son fundamentales para la llegada de las políticas de Desarrollo Rural a territorio”. Invitó a que más organizaciones se postulen como Agentes Territoriales de Desarrollo Rural, por el que los productores tienen ventanilla para acceder a estos apoyos.
Comentó que los técnicos habilitados para la primera edición, que superó los 130, lo siguen estando para esta edición y se amplía la invitación a más interesados, que tendrán capacitación llevada a cabo por INIA. Mencionó que el apoyo económico que recibirán los proyectos es de hasta 35.000 dólares por grupo de productores, que cubre hasta el 80% del total de los costos.
Cadenas de impacto
El gerente de Innovación y Comunicación de INIA, Miguel Sierra, explicó que “es central en este proyecto, las transiciones agroecológicas en un marco de colaboración institucional y con financiación internacional y en el cual trabajamos lo que son cadenas de impacto. El rol de INIA es aportar evidencia científica a la política pública que se está construyendo, con un componente importante de capacitación a técnicos. Se han sistematizado las prácticas hacia la transición agroecológica, en horticultura, en lechería, en ganadería, la gestión del campo natural, el control biológico de plagas”.
Segunda edición
Senda Agroecológica 2ª edición promueve la adopción de prácticas agronómicas basadas en la ciencia ecológica, como estrategia para incrementar la sostenibilidad económica, social y ambiental de los productores agropecuarios del Uruguay. Sigue la misma línea de su primera edición, implementada en 2022 y mejorada para esta segunda instancia.
Se busca promover la protección y uso eficiente de los recursos naturales, manteniendo o incrementando los servicios ecosistémicos; la biodiversidad; la reducción de aplicaciones de insumos externos de síntesis artificial; la protección de áreas naturales; y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Está dirigida a grupos de productores familiares, y no familiares (pequeños y medianos) que estén vinculados a una organización rural constituida como Agente Territorial de Desarrollo Rural (ATDR).
