Fueron presentados públicamente el pasado martes los tres violines creados en el taller de luthería de Casa de Cultura, en una emotiva ceremonia en la que, además, se interpretaron piezas musicales ante el numeroso público que llegó al Espacio Cultural Gobbi. Uno de los instrumentos, el creado por Sergio Silva, fue el que sonó en vivo por primera vez, mientras que los creados por los alumnos del taller Nicolás Martínez y Gonzalo Ré fueron exhibidos.
Previo al concierto que brindó la Orquesta Juvenil de Paysandú, integrantes del programa Iberorquestas, que lleva adelante los talleres en toda Latinoamérica, dirigieron algunas palabras junto a autoridades departamentales.
“ESTO TIENE UN VALOR ENORME”
El maestro Lionnel Genovart, quien coordina los talleres desde su atelier en Italia, dijo que “todo esto nace de una necesidad, pues el sistema de coros y orquestas siempre ha necesitado una manutención de los instrumentos y venía con esta inquietud desde hace muchos años. En un principio, cuando intentaba ayudar, lo que se me ocurrió fue que era necesario formar a las personas; al poco tiempo me llamó Ariel (Britos) y me dijo que ‘tenía una idea’, algo que me llamó mucho la atención y al poco tiempo llegó la pandemia y empezamos a hacer todo virtualmente”. Genovart aclaró que la idea era trabajar “con las maderas que tuviera cada uno en su país, porque es imposible salir a comprar. Realizamos diseños y en el caso del violín de Paysandú se consiguieron maderas autóctonas y algunas que pudimos comprar a medida que se avanzaba: a modo de ejemplo, hay plátano y álamo de Montevideo”. Además, Genovart comentó a EL TELEGRAFO que le pareció “buenísimo esto de ‘federalizar’ de alguna manera el proyecto; por supuesto que es importante que existan oportunidades en la capital, pero esto tiene un valor enorme.
Coordinar todo desde Roma es un poco complejo, sobre todo el pensar a través de una pantalla cuando damos una parte online, porque yo debo pensar cómo trabaja cada uno de los asistentes al taller; una cosa es cuando estoy presente y puedo ayudarlos individualmente, pero al ser online se vuelve complejo, aunque me divierto y me hace ser creativo todo el tiempo”. El presidente del programa Iberorquestas y director de la Orquesta Juvenil del Sodre, Ariel Britos, destacó que ahora el programa nuclea a catorce países “en una propuesta que tiene un perfil humano, social, sin descuidar lo académico; en toda nuestra familia de orquestas teníamos una carencia enorme en cuanto al mantenimiento de los instrumentos, que muchas veces se deterioran y envejecen más rápido de lo que nos gustaría. No dábamos a basto con la compra de instrumentos y allí fue donde pensamos que lo mejor que podíamos hacer era capacitar a maestros luthiers”. Además, elogió a Genovart diciendo que “es un gran maestro, un constructor de instrumentos profesionales muy codiciados en todo el mundo. Su sello es de calidad y aceptó inmediatamente cuando lo llamamos”.
Sobre el desarrollo que ha tenido el taller de Paysandú, Britos destacó el “apoyo franco y decidido cuando decidimos instalar el taller acá, superando por lejos al taller de Montevideo, donde de hecho, no han terminado los primeros violines; ahora ya no estamos sólo arreglando, estamos construyendo, y sería genial, como deslizó el director de cultura Eugenio Pozzolo, poder instalar una fábrica de instrumentos”.
“ES UN HECHO HISTÓRICO”
Así lo calificó el secretario general de la intendencia, Fermín Farinha, quien agregó que “es la culminación de un proceso intelectual que hizo que en Paysandú se pudiera generar un instrumento de esta calidad. Esto está asociado al capital humano, a lo social, es tener la perspectiva de que el instrumento sea ejecutado por lo mejor que tenemos en Paysandú, que son nuestros niños”.
