Paysandú celebró acto de la reinstalación del Monumento a la Libertad en plaza Constitución

La multitud estalló en aplausos cuando se descubrió la estatua emplazada sobre el pedestal en plaza Constitución.

Tuvo lugar en la mañana de ayer el acto de reinstalación del Monumento a la Libertad, el que originalmente estuvo emplazado en el centro de la plaza Constitución y hoy ha sido reemplazado en el sector sureste de la plaza, como resultado del trabajo de siete años desarrollado por la comisión de ciudadanos que trabajó en aras de este objetivo.
El acto contó con la presencia de autoridades departamentales encabezadas por el intendente Guillermo Caraballo, diputados por nuestro departamento, el cónsul argentino en Paysandú, ediles, representantes de diversas instituciones de nuestro medio y numeroso público, habida cuenta de la trascendencia de este acontecimiento histórico-patrimonial-cultural.
La estatua original fue destruida en el bombardeo de Paysandú y ha sido reconcebida en base a los datos existentes sobre el monumento original, lográndose hacerlo a pleno con el pedestal de mármol de Carrara, pero solo se han tenido datos incompletos sobre las características de la estatua original, por lo que se llevó a cabo una investigación de la que surgieron pautas para encargarle el trabajo al escultor floridense Ramón Cuadra Cantera, profesor de escultura de la Escuela Pedro Figari de Montevideo y asesor de arte del Ministerio de Educación y Cultura.
El acto de inauguración de la obra se inició con la interpretación del Himno Nacional a cargo de la banda municipal “José Debali”, conducida en esta oportunidad por el maestro uruguayense Martín García, iniciando la parte oratoria el intendente departamental Dr. Guillermo Caraballo, quien expresó que es fruto del trabajo de varios años, “el primer monumento a la libertad que se levantó en el país, el segundo en toda América Latina y el tercero en el mundo”, a la vez de reconocer la tarea incansable llevada adelante por Andrés Oberti y Rubens Stagno en el grupo de ciudadanos para hacer realidad este proyecto, en ambos casos con “el don de la persistencia”.
Subrayó que este documento “no se hizo a ningún héroe ni ninguna divinidad, sino a un valor eterno y universal, como lo es la libertad”, en tanto consideró que “en aquel entonces, como ahora, se repite la historia, porque una comisión de vecinos lo empezó en febrero de 1852, y contaron con el apoyo unánime de la Junta Económico Administrativa, presidida por Benito Chain, y se concretó siete años más tarde, en 1859, y contó también con el apoyo unánime del pueblo y las autoridades de Paysandú”.
“Hoy también la iniciativa de reinstalarlo surgió de un grupo de ciudadanos y con el apoyo de las autoridades desde el momento mismo en que se formó esta comisión en el año 2014, cuando el Partido Nacional estaba al frente del gobierno departamental, y debe reconocerse el apoyo. Se concretó en nuestro período de gobierno, con recursos de los ciudadanos, del gobierno nacional, del gobierno departamental y en especial quiero destacar el trabajo de los funcionarios de la Intendencia, de la Dirección de Obras y Servicios”.
Trajo a colación la inscripción original de la base del monumento que contó con el impulso del jefe político de Paysandú Basilio Pinilla en el sentido de que “la educación es la base de la libertad”, lo que entraña “el valor que significa la libertad como concepto, aplicada al individuo en toda su extensión, siempre dentro del marco de la ley, libertad para pensar, libertad para elegir, libertad para decidir uno mismo qué ser y con quiénes ser, cómo convivir”.
Destacó que tras esta reinstalación, “los sanduceros tenemos todos un motivo más para estar orgullosos y mostrarnos a nosotros mismos y a quienes nos visiten que este es un departamento de trabajo, de paz, y progreso, donde se vive en libertad de pensamiento , respeto mutuo y lo que se educa para ello”.

“AQUELLO PARECÍA UNA UTOPÍA”

Por su parte Andrés Oberti Rual, integrante de la Comisión Departamental de Patrimonio Cultural subrayó que “hace siete años un grupo de ciudadanos nos propusimos que Paysandú volviera a tener su monumento a la libertad. Aquello parecía una utopía y hoy es una hermosa realidad”, y recordó que el proyecto tuvo sus marchas y contramarchas, como todo proyecto de esta naturaleza.
Reseñó Oberti la historia del monumento y la participación de destacados gobernantes y ciudadanos de nuestro medio para su concreción, así como la larga serie de pasos que dio el grupo de sanduceros que ha trabajado para recrear aquella estatua, de la que solo se tenían datos sobre su pedestal, que había sido construido de mármol de Carrara y que la estatua había sido encargada a Italia. De ella solo se tenían sus medidas –un metro 36 centímetros de altura– y lo único que han sido repetidos por los historiadores, sin aportar nada más.
“Al principio éramos quien les habla, más el arquitecto Rubens Stagno, la profesora María Julia Burgueño y los ingenieros Julio Rocco y Milton Carballo. Luego se sumaron Mario Dorfman, Luis Alonzo y el arquitecto Sergio Babic”, precisó, para acotar que precisamente el desconocimiento de datos sobre la estatua hizo que se viajara a ciudades argentinas para contactar a personas e instituciones y también hacer averiguaciones en Europa, pero sin lograr descifrar la mayor parte del enigma.
“Hubo que estudiar simbología y estatuaria y discutir bastante entre nosotros y con el escultor, sobre cómo debió haber sido nuestra estatua italiana, para llegar a algo relativamente lo más cercano posible a la supuesta realidad, pero de algún detalle propio. Entonces, teníamos los datos suficientes como para rehacer el pedestal tal cual era, y –aunque no tuviéramos la estatua original– valía igual la pena el esfuerzo”, significó.
Trajo a colación que “repitiendo simbólicamente lo sucedido aquel 20 de enero de 1860, hoy nuestra banda interpretó el Himno Nacional Uruguayo pero dirigida por el maestro Martín García, quien vino expresamente desde la histórica Concepción del Uruguay a participar, como buen vecino y hermano argentino, a quien por supuesto agradecemos mucho”.
Culminada la parte oratoria, se realizó el descubrimiento de la estatua emplazada sobre el pedestal, ante el caluroso aplausos de los asistentes a este acontecimiento histórico para Paysandú.