Última semana de actividad para lanas con menos actividad

En el mercado local de lanas, la actividad comercial se redujo sensiblemente durante los últimos días, “reflejo del descenso que mostró la demanda desde el exterior y la baja en los valores del mercado australiano”, señaló a EL TELEGRAFO José Luis Trifoglio.
Por otra parte, en el sector productor en general “no se percibe apuro por comercializar la lana, ya que van enfrentando sus necesidades económicas con ingresos de la ganadería”, agregó el responsable del departamento de Lanas de Zambrano y Cía., agregando que la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana del Uruguay “publicó un reducido número de operaciones esta semana”.
Por otra parte, el informe de Faxlana sostiene que el mercado lanero uruguayo registró hace dos semanas una corriente de negocios en lanas medias principalmente, donde se lograron comercializar varios lotes. Sin embargo algunos consignatarios entienden que la oferta tensó fuertemente una cuerda que no estaba firme y ello llevó a que la demanda se retirara de la operativa.
Existe mucha cautela a nivel de la demanda debido a que los negocios en el exterior no logran concretarse de manera tal de mantener una secuencia de negocios que permita agilizar la zafra. Varios de los operadores consultados reconocieron que esperaban una mayor corriente de negocios antes del cierre de la primera mitad de la zafra. Sin embargo la demanda está cautelosa y retraída, mientras que los productores haciendo caja con los muy buenos valores del vacuno y el ovino no están necesitados de vender, salvo aquellos productores que por necesidades puntuales y personales salen a comercializar su lana.
La baja generada en la pasada semana y el comienzo de la presente llevó a que varios operadores no encontraran respuesta en la demanda para algunos lotes que se ofertaron esta semana, en tanto que es coincidente en la mayoría de los casos respecto a la distancia entre las expectativas de los productores y los valores actuales para las lanas Merino; “están muy lejos las puntas” graficó un operador de mercado de Artigas.
En las dos últimas zafras, el SUL realizó un relevamiento de la diferencia entre los valores de los lotes acondicionados y sin acondicionar, remarcando la importancia de la grifa verde en cuanto a diferencia de precios y con una grifa celeste en el medio. Sin embargo en esta zafra, acondicionar grifa celeste o no acondicionar es prácticamente lo mismo para algunos sectores de la demanda, que están premiando solamente los lotes acondicionados grifa verde. En este sentido en el norte del país el SUL maneja que aproximadamente el 80% de la lana se esquila y acondiciona con esta grifa, en tanto que en el centro y sur del país se sitúa en el 50%.
EXTERIOR
En los últimos remates de lana programados para el mes de noviembre en el mercado australiano, los precios volvieron a bajar por segunda semana consecutiva en términos de dólares americanos y también en moneda local. Los diferentes sectores de la demanda estuvieron más cautelosos y selectivos. Por el lado de la oferta, varios productores australianos viendo que los precios bajaban retiraron un volumen de fardos importante antes de comenzar las subastas, mientras que algunos de los que ofertaron, aceptaron la nueva realidad y el porcentaje de colocación, si bien fue relativamente bajo, fue superior al de la semana anterior.
El Indicador de Mercado del Este bajó 22 centavos de dólar americano (2,1%), respecto al cierre de la semana pasada y se ubicó en U$S 10,35 por kilo base limpia. Todas las categorías de lana para peinar que se pusieron a la venta registraron bajas en sus cotizaciones. Los descensos se ubicaron entre 0,8% (17,5 micras) y 5,3% (28 micras).
En el marco de una semana en la que se vendió una selección importante de lanas superfinas, principalmente en el centro de Sydney, el precio máximo lo alcanzó un fardo de lana de 12,9 micras de diámetro promedio, 37 N/Ktex de resistencia a la tracción y 63,8% de rinde al peinado que se pagó U$S 20,34 por kilo base sucia.
La oferta semanal fue de 37.800 fardos, de los cuales la demanda adquirió el 85,4%.
Según informó Australian Wool Exchange, hay inscriptos más de 41.200 fardos para las próximas subastas, que están programadas para la primera semana de diciembre.
El mercado en general no se estabiliza y los diferentes sectores de la demanda están comprando de acuerdo a sus necesidades más inmediatas y no presionan la compra. La semana próxima, con una oferta voluminosa, será clave para ver qué rumbo toma el mercado camino a la finalización del primer semestre de esta zafra. Algunos analistas están esperanzados de que el IME no baje la barrera de los U$S 10, pero las señales que vienen de la demanda no permiten ser demasiado optimistas al respecto.
EXPORTACIONES DE LANA
Las exportaciones de lana en el trimestre entre agosto y octubre sumaron solo 3.158 toneladas peso producto, un descenso de 52% respecto a los mismos meses del año anterior y de 61% en comparación con el mismo trimestre de 2017, de acuerdo con los datos de Aduanas en base a solicitudes de exportación.
Los argumentos en la lentitud de las ventas al exterior son dos: por un lado, una disminución en la cantidad de lana vendida por parte de los productores, en tanto los precios de mercado no están a la par de las expectativas generadas; por otro, la muy débil demanda desde el exterior, lo cual dificulta las exportaciones tanto de quienes trabajan en sucio como de quienes industrializan la materia prima y venden la lana peinada. “Es más importante la lentitud de las ventas al exterior, el mundo está girando mucho más lento”, dijo gráficamente un industrial consultado por Faxlana.
Lo que más afectado se ha visto es la exportación de lana sucia. En los 12 meses a julio de 2018 Uruguay exportó 17,7 millones de kilos de lana sucia, volumen que descendió a 13,7 millones en el año a octubre de 2019. Mientras tanto, las exportaciones de lana peinada se mantuvieron mucho más estables con 14,6 millones exportados en el año a julio de 2018 y 13,7 millones en los últimos 12 meses.
Más allá de eso, en los meses de setiembre y octubre las exportaciones de lana peinada cayeron al entorno de las 500 toneladas mensuales, nítidamente por debajo de las alrededor de 1.200 toneladas que se han exportado en promedio por mes en los últimos cuatro años.