Tras 17 años Juan García, uno de los árbitros de la final birlada al Paysandú BBC, todavía se siente avergonzado

Diego Losada le recrimina a la dupla arbitral conformada por Félix Fares y Juan García.
Rivero va a realizar el tiro. El reloj está en cero, y el DT Pablo López levanta las manos al cielo tras escuchar la chicharra.

“El deporte sufrió una humillación histórica”, fue el titular de EL TELEGRAFO del 24 de junio de 2003. No hace falta decir más nada para que cualquier sanducero recuerde con claridad la situación.
Ni siquiera tiene que ser fanático del deporte. Hasta el más distraído se acuerda lo que sucedió la noche anterior en el Palacio Peñarol de Montevideo: Paysandú BBC fue despojado del título de la Liga Uruguaya.
La letra fría dirá que Defensor Sporting se consagró campeón de la primera edición del torneo, al vencer al equipo sanducero que lideraba el entrenador Pablo López por 73 a 72, en una definición para el infarto.
Pero más allá de lo cambiante del partido, de que Paysandú BBC no pudo concretar la superioridad manifiesta que demostró a lo largo del partido, nadie puede olvidarse de la actuación de los árbitros Félix Fares y Juan García, que no cobraron instantes antes de la finalización del partido una clara falta a favor de los sanduceros, cuando la cosa iba 72 a 71 a favor de Paysandú BBC. Y que para completarla validaron un doble de Defensor, el del título, cuando el partido había finalizado.
Un mal recuerdo
Nadie puede olvidarse de la incidencia: falta a Claudio Charquero que no se cobró, y ataque desesperado de los violetas. Daniel Rivero que atina al tiro pero la chicharra anunció el fin del partido cuando la pelota iba a ser impulsada por sus manos.
Pero la dupla arbitral validó el doble ante la sorpresa de todo el mundo.
El Palacio Peñarol estaba repleto de sanduceros. Por acá, a casi 400 kilómetros de distancia, todos estaban prendidos al televisor.
Y vieron, con cara de asombro, lo mismo que el relator de la transmisión de Tenfield dijo apenas sonó la chicharra: “¡Ganó Paysandú! ¡No, no, no! Le dan el gol, ¡pero no valía! ¡No puedo creer! Defensor campeón. ¡No puedo creer! Es increíble el gol de Rivero, ¡para mí no valía!’”.
Mientras los hinchas violetas invadían la cancha, el comentarista de la época remataba: ‘“Para mí fue fuera de tiempo el doble de Rivero”. Igual, bastaron pocas horas para que ambos barajaran hipótesis poco creíbles y que nada tenían que ver con la realidad, para darle la razón a los árbitros.
17 años después…
Ayer Paysandú se despertó revolucionado al leer una nota del portal Basquet Total: el exárbitro Juan García reconoció que “me voy a morir con ese sentimiento de vergüenza” por la actuación en aquella final.
Debieron pasar 17 años para que alguien reconociera lo que todos vieron, más allá de que con el paso de los días algunos dijeron primero una cosa y luego otra. Pero por si algo faltaba, el que lo reconoció fue uno de los protagonistas.
Juan García fue claro, contundente en sus declaraciones. “Fue un escándalo, donde hubo dos jugadas determinantes. El foul más grande de la historia del básquetbol uruguayo, que no fue sancionado, y el gol de Rivero (Daniel) pasada la hora. Después hicieron todo un circo mediático, una farsa con el reloj, pero ese gol no valió”, dijo sin tapujos.
El árbitro reconoció que “en la cancha no dije nada”, y también que “me hago responsable de lo que pasó, porque los arbitrajes son colectivos, no son individuales”.
“No fue algo normal”
“El arbitraje de ese día fue bochornoso, te lo puedo decir porque fui protagonista de lo que pasó. Me hice responsable de lo que pasó”, remarcó García.
Además, reconoció que “después fui al Tribunal y expliqué lo que había pasado. ¿Sabés lo que me dijeron en el Tribunal? ‘Juan, te van a suspender por esto que estás diciendo’. Y yo les dije que no me importaba nada, porque estaba contando todo. Posterior a eso yo presenté mi renuncia al Colegio”.
Al día de hoy García no sabe qué pasó. Pero sí tiene plena conciencia de que aquel final del partido “no fue algo normal”.
“Ese foul debe ser el más grande de la historia y no lo pitamos. Yo estaba a 14 metros, pero no importa: lo tenía que haber pitado. La mecánica indica que no puedes pitar cosas que no corresponden en ciertos tramos de la cancha, pero repito: si vos ves a alguien que le pegan cuatro balazos del otro lado de la cancha, no te podés quedar de brazos cruzados. No le pegaron cuatro balazos a Charquero, pero fue un foul de aquellos. Yo lo tenía que haber pitado, pero estaba a 14 metros. ¿Y sabés lo que tiene ese foul? Si yo lo pito y la TV demuestra otra cosa, ahí quedaba pegado. Pero no pité y hasta hoy en día me lo cuestiono”, señaló.
García confesó que “me voy a morir con ese sentimiento. Nunca me pude sacar ese sentimiento de encima. Pasó el tiempo, pasan los años y yo sigo con la misma sensación de vergüenza con lo que pasó”.
¿Y el doble?
El ahora exárbitro reconoció que tampoco pudo pitar que el doble del título no era válido. Y dio sus razones.
“Es que enseguida se metió todo el mundo para adentro de la cancha”, recordó. Y sumó que “nos agarraron los canas y nos llevaron para el vestuario. Se nos vino toda la gente de Paysandú arriba. Ahí me di cuenta que no había valido”.
García reconoció que “cuando terminó el partido podría haber arrancado: ‘pi, pi, pi, el gol no valió, el gol no valió’. Pero no lo hice. Podría haberlo hecho, no sé si hubiese contribuido en algo. Quizás sí; con el diario del lunes sí. Pero en el momento no lo hice. Llamalo como quieras: me cagué, no quise, no me gustó, temor, miedo, lo que quieras… Pero no lo hice y eso es algo que tengo adentro, hoy con el paso del tiempo digo: ‘lo tendría que haber hecho y que explotara Roma’. No sé. En virtud que no lo hice, quizás siento más vergüenza por eso”.
Después vio, escuchó y leyó todo el circo que se armó alrededor de los dos fallos que sepultaron al Paysandú BBC. Las explicaciones de quienes en el momento, sorprendidos, relataron la realidad. Y tejieron otra más tarde.
“Lo que miré fueron las tomas que hacían con los relojes y el tiro de Rivero que fue todo una farsa, armaron todo una farsa. Y eso me hizo convencer aún más que el gol no valió”, dijo García al respecto.
El exárbitro no puede sacarse la culpa de encima. “No sé dónde puedo ver el partido completo ahora, si llegara a estar lo miraría para ver esa jugada, pero yo estoy convencido que ese gol no valió. Aparte no lo digo yo, sino toda la prensa también. Pero la dibujaron, no sé qué intereses había ahí”, remató 17 años después.