El arquitecto Mauro Peroni presentó una nueva propuesta para la zona portuaria, un proyecto válido en sí mismo o que podría ser complementario al de los profesionales del grupo Babel, aunque cambiando algunas edificaciones.
Su idea es utilizar la manzana entre avenida Brasil, Paz, Carlos Gardel y Ledesma, construyendo una gran plataforma (de una manzana) sobre pilotes, de hormigón para evitar los efectos de las inundaciones. Y en caso de creciente, esa manzana estaría unida a la plaza Artigas por una pasarela aérea.
Discrepa con el proyecto (presentado por Babel) que es rellenar a la cota 11 metros, porque se entierra todo el resto, sale carísimo y además es un espacio público, por lo que considera que no habría que construir allí o muy limitadamente. En el mundo entero se recuperan los terrenos de las ruinas industriales en plena ciudad para crear espacios verdes, y aquí se propone lo contrario, construir en un espacio verde que es un pulmón para la ciudad y que más tarde lo vamos a lamentar cuando ya no haya marcha atrás.
Está bien que se quiera construir algo, pero muy limitado y con gran beneficio en todos los aspectos para la ciudad.
Peroni expresó a EL TELEGRAFO que “este anteproyecto lo concebí en 2012, es en la zona del puerto, pero en una manzana que está completamente abandonada, que tiene todos los servicios y está en una zona emblemática de la ciudad y sería muy positivo en todos los aspectos para Paysandú. Es en avenida Brasil, en la manzana donde está un galpón donde había una boite que es de un privado, y en la otra esquina hay una casita que habría que conservar, que pertenece a la Intendencia. Allí podrían encontrar lugar algunas de las torres propuestas”, explicó.
CENTRO COMERCIAL Y EDIFICIOS
Sobre la posibilidad de inundaciones, dijo que “tengo una solución a esto”, afirmando que se construye sobre pilotes; “El proyecto prevé un centro comercial a cielo abierto lo que es la última tendencia a nivel mundial y cuatro torres en las esquinas extremas (estas torres no fueron proyectadas, lo que se ve en los renders es solo esquemático). Dos para viviendas de frente al norte y al río y dos con frentes a avenida Brasil destinadas, una a un hotel de prestigio 4 ó 5 estrellas y la otra para una torre de oficinas. En caso de creciente está al abrigo, y para acceder al lugar se hace a través de un puente en la plaza Artigas. Este conecta con una skyline que llega hasta el centro comercial por una vereda elevada en la vereda norte de la calle Don Bosco. Se ha gastado mucho dinero en hormigón para reparar las calles de la ciudad –lo que está muy bien–, por lo que hacer este tipo de construcción en acero u hormigón con calzada de madera no debería ser un problema”.
Precisamente, “todo el deck (donde se asienta el centro comercial) es de madera. Lo llamé Puerto Heroico, porque está hecho al estilo de los puertos antiguos. En la calzada que será un deck de madera dura, habrá partes caladas para dejar paso a árboles y palmeras plantadas en pleno suelo. Los edificios comerciales serán construidos en madera y se combinarán de una y dos plantas, creando un ambiente acogedor. El suelo liberado en el terreno será destinado a parkings y eventualmente a ferias u otras utilizaciones posibles”, aclaró.
La propuesta de Peroni es “como complemento” de la realizada por Babel, y “estoy de acuerdo que hagan algo ahí, pero que no construyan tanto y también sobre pilotes para no enterrar la vnida Costanera, el Yacht Club y las construcciones actuales. En claro conservar la transparencia”.
Entiende que “para las oficinas, es mejor lugar avenida Brasil que la costa, con acceso fácil a la avenida, con todos los servicios, hay lugar para un supermercado, terrazas, cafeterías y además sería un poderosísimo atractivo turístico, porque esto es único en la región, que los 80.000 turistas que van a Colón, al ver esto vendrían (a Paysandú), y hasta de Buenos Aires”.
Ya de por sí, los nuevos apartamentos, las oficinas, el hotel y otras nuevas operaciones que se construyan, ayudarían mucho a la viabilidad del centro comercial, entiende. “Es un complejo de fácil accesibilidad ya que está en el eje principal de la ciudad”.
También planea que “frente a la iglesia San Ramón se construyan unas gradas a partir de la skyline para que los jóvenes puedan reunirse y organizar algunos espectáculos callejeros como los que se ven en ciudades turísticas”.
LA UNIVERSIDAD EN LA ESQUINA
Propone que en la esquina de Don Bosco (continuación de Florida) y Zelmar Michellini “se construya la universidad, un edificio elevado sobre pilotes con acceso por la skyline y un campus en el terreno natural con una parte rellena a nivel del edificio. Todo esto es centrar una cantidad de actividades importantes para Paysandú, con el centro comercial, las oficinas, el hotel y la universidad que tiene más razón en esta ubicación. Todo el barrio ganaría en actividad, un barrio que ahora está casi muerto disponiendo de excelente accesibilidad y todos los servicios”.
Pero aclara que “esta operación tendría que hacer volar la imaginación y recibir muchas más propuestas”.
A su juicio, “en avenida Brasil hay muchos terrenos baldíos y casas que hay que conservar porque son patrimoniales, y otras que no tanto. Se guarda lo patrimonial, y en el resto se puede ir renovando con nuevas construcciones de apartamentos, locales comerciales restaurantes cafeterías heladerías etcétera. Los que se conectarían a la skyline con solo un cruce sobre avenida Brasil por cuadra. La conexión a la skyline, estaría a cargo de las operaciones que la necesiten. Cereza sobre la torta, cuando hay creciente el barrio se convierte en Venecia”.
A su parecer “la zona quedaría irresistible, un poderosísimo atractivo turístico, comercial, residencial, etcétera que no muchas ciudades tienen la suerte de contar con un barrio como este”.
Sobre si tiene una evaluación del costo, dijo que “no tengo idea”. Pero esta es una alternativa para relanzar un barrio” y la ciudad.
UN PROYECTO ANTERIOR, EN LA PARK
Cuando en 2017 las playas sanduceras no tenían una buena calidad, el arquitecto Peroni había hecho una propuesta para la zona lindera a playa Park, donde ahora se propone una intervención. En aquel tiempo, había proyectado la construcción de una zona de parque con caminería, donde habría una piscina climatizada con energía solar “que se podía utilizar nueve meses al año para 1.200 bañistas simultáneamente y un hotel de 75 habitaciones, con cafetería y restaurante”, pero su propuesta no tuvo la trascendencia esperada y “no hubieron preguntas.
Y cuando eso pasa es porque nadie tiene interés en hacerlo, o no cree. Y una sociedad que no tiene visión, que no cree que puede progresar, está muerta. ¿Cómo quieren que los jóvenes no traten de emigrar o se vayan?”
Dijo que “este proyecto lo presento tres veces, la primera cuando Walter Belvisi era intendente, después se presentó en el Cine Club, y después el Grupo de la Costa lo presentó porque insistí. La propuesta nació cuando hice la tesis para recibirme de arquitecto. Y el mejor paisajista de Francia me ayudó a hacer el paisajismo. Se dispusieron 95 especies de árboles y arbustos, hice todo el proyecto de plantaciones para que el parque tuviera flores todo el año y preservar la transparencia y los puntos de vista sin obstrucción para ver el río”.
En su mensaje final, dijo que “Los invito a dejar de pensar en chiquito, no somos un paisito (denominación que detesto), somos un gran país, con gente formidable y muy competente. Tratemos de pensar en grande y de soñar, todo es posible si se le pone voluntad y determinación. Vamos que se puede.
