El balance es clarísimo: no se jugó como se pretendía, pero se logró un resultado alentador. El 1 a 1 cosechado por la selección Sub 17 de Paysandú en su visita a Maldonado, le permite aspirar a alcanzar el próximo fin de semana la clasificación a las semifinales de la Copa Nacional de Selecciones.
“No mostramos el fútbol que pretendíamos, pero el resultado fue bueno y nos permitirá definir de locales. En realidad era de esperar algunas de las cosas que sucedieron, como la ansiedad, porque era retomar todo esto después de muchos meses. Pero más allá de todo, el viaje fue excelente, la concentración y el compartir una nueva experiencia con quienes se integraron recientemente a este proceso”, destacó el entrenador Álvaro Ilaharregui.
Más allá de que la ansiedad jugó su papel para no alcanzar el rendimiento deseado, también hay que tener en cuenta las ausencias de Alzamendi y Olivera, quienes no quedaron habilitados pese a que “se subió la ficha el martes pasado”.
Pero “el grupo demostró que está por encima de todo, y el equipo respondió pese a esas bajas”, sumó el técnico, para quien “los cambios en el complemento le dieron oxígeno y otra dinámica al equipo”, aunque está claro que “ese gol nos da la tranquilidad para encarar la semana”.
Ilaharregui contó que “refrescamos la memoria en el vestuario”, en los 15 minutos de entretiempo. “No estábamos haciendo lo que veníamos mostrando, lo que se veía en las prácticas quedó muy lejos. Y los jugadores lo saben, fue algo que hablamos incluso después del partido. Pero confiamos en que se van a soltar, van a hacer el juego que venían mostrando, y esperamos tener a todos los jugadores para la revancha. Fue un buen resultado aunque sin el fútbol que esperamos, porque lo nuestro es tratar de jugar como queremos y llegar con más opciones, pero ese empate nos permite saber que dos resultados nos van a servir. Estamos tranquilos porque se están haciendo las cosas bien”, sentenció el DT de la Blanca chica, que hoy vuelve a trabajar en el Complejo Don Bosco.
