En noviembre o diciembre de este año se prevé pasar a ocupar las viviendas de Covilace, cuyo complejo habitacional sito en Zorrilla de San Martín y Éxodo está casi terminado y se están dando los trabajos de terminación a las 41 unidades habitacionales.
Diego Lauyé, dirigente de la cooperativa, destacó a EL TELEGRAFO que el sábado tuvo lugar el sorteo de las respectivas viviendas entre los beneficiarios, “para determinar a quien la toca cada casa”, por cuanto la obra está cerca de terminarse.
Se trata de viviendas enmarcadas en el Plan de Vivienda Sindical, con un 98 por ciento de avance de obra, y actualmente solo resta el salón comunal, que comprende la restauración de la casona del lugar, para cumplir con lo establecido en el proyecto correspondiente, mientras que “en las viviendas estamos culminando detalles, como es el caso de la pintura”, entre otros aspectos incluidos en esta etapa final.
Precisó que “estamos pensando que en noviembre o diciembre estaremos pasando a ocupar las viviendas; la idea es estar todos adentro antes de finalizar el año”, de forma de llegar a la ansiada instancia de ocupar el techo propio, tras largo tiempo de instrumentación del proyecto, que se iniciara en 2011 y fuera dando lugar a sucesivas etapas hasta lograr el préstamo a través del sorteo de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV).
Las 41 viviendas han sido erigidas a través del sistema Emme Due, con la empresa Concrespuma Bromyros, que proporciona los elementos como el isopanel para el techo, a la vez de contar en la estructura con paneles de poliuretano y malla electrosoldada, con revoque estructural de tres centímetros y medio de capa, por lo que la espuma aislante queda al medio y así se le da fuerza a la estructura de la vivienda.
Observó que las viviendas prefabricadas cuentan por lo tanto con muy buen aislante térmico y ello favorece la calidad de vida de sus ocupantes y contribuye al ahorro de energía. “Optamos por este sistema dentro del abanico de opciones que se nos ofreció, con el correspondiente asesoramiento técnico”, acotó Lauyé.
El proyecto se puso en marcha por la cooperativa en la modalidad de vivienda sindical en el año 2011, “lográndose conseguir el terreno en diciembre de 2014”, se firmó el boleto de reserva “y salimos sorteados el 14 de agosto de 2016. El 31 de agosto de 2017 escrituramos y tuvimos la habilitación para poder iniciar la obra el 22 de febrero de 2018, instancia en la que firmamos la correspondiente acta de inicio de obra”.
“De esta forma, comenzamos un proceso de 30 meses de obra, en el que se ha abordado la tarea a través de la ayuda mutua por los propios socios y con la contratación de maquinaria para el movimiento de tierra y mano de obra calificada. Estamos ahora en la etapa de los detalles finales, y esperamos poder mudarnos para fin de año”, señaló el dirigente de la cooperativa de vivienda sindical Covilace.
