El sindicato de trabajadores de UTE (AUTE) realiza una recorrida nacional, en la que denuncia “recortes en las inversiones que se viven desde hace muchos años en el organismo pero que se profundizaron con este presupuesto que el Poder Ejecutivo y el directorio elaboraron para 2020-2021”, dijo a EL TELEGRAFO el vicepresidente del sindicato, Gonzalo Castelgrande.
Según AUTE, en la última década la inversión en el ente representó un 20% de la totalidad de la inversión pública y un 45% del universo de las empresa públicas. El presupuesto manejado en 2019 rondó 2.000 millones de dólares y para los próximos dos años, aseguran que se reducirá en 250 millones de dólares. Las inversiones previstas se estiman en 1.096 millones de dólares. Los recortes venían del quinquenio anterior, cuando se presupuestaron 1.366 millones de dólares y efectivamente se ejecutaron 1.190 millones. Por otro lado, afirman que las inversiones determinadas por el acuerdo con la empresa UPM se llevarán una parte importante del presupuesto.
MENOS APORTE
UTE ha sido de las empresas con mayores aportes a Rentas Generales, tanto por sus resultados como por el volumen de impuestos específicos y generales.
El sindicato denuncia que, mientras que las empresas privadas se declaran de “interés nacional” y por lo tanto reciben exoneraciones impositivas, UTE paga todos los impuestos por la misma inversión. La proyección de esta reducción se ubica en torno de los 750 millones de dólares y pasará de 1.168,8 millones en el quinquenio anterior a 414 para este quinquenio.
Al tiempo que el ente proyecta un crecimiento de la energía vendida, estima un aumento de las pérdidas –o acceso a la emergía en forma irregular– más alto que en la crisis de 2002. Cuando en aquel año las pérdidas fueron 20,1% de la producción, este año finalizará con 22,98%.
PERSONAL
Además, AUTE subrayó que hay “un recorte muy grande de las inversiones y en el funcionamiento del ente estatal, pero fundamentalmente de personal desde hace cinco años”.
El organismo cuenta con unos 6.500 “y deberían ser cerca de 8.000 funcionarios. Se estima que al finalizar este período seremos 4.900 trabajadores con una pérdida entre funcionarios y contratados de más de 3.000 puestos de trabajo”. La demanda de energía eléctrica crece a razón de 3 a 5% anual “y auguramos situaciones complicadas sin trabajadores para cubrir los servicios, atender el teléfono, salir en las cuadrillas o brigadas para atender los reclamos o apagones”.
El promedio de edad de los trabajadores “es muy alto. Tenemos unos 1.300 funcionarios que están próximo a jubilarse y la política de recortes comenzó en 2015. Desde entonces, de cada tres funcionarios, solo ingresan dos”.
CORTES
En el marco de la pandemia sanitaria y “en las ollas populares instaladas en varias filiales del país, uno de los pedidos que tuvimos fue por los cerca de 25.000 usuarios con cortes del servicio previstos a nivel nacional. Hicimos una solicitud al directorio para evitarlos, porque pensamos que en un momento de pandemia, la gente tenía que quedarse en la casa y hacer cuarentena. El directorio accedió a esa solicitud del sindicato, y la medida se viene prorrogando”.
TOMA CONSUMO
AUTE y el directorio se encuentran en plena discusión, por la toma de consumo, por la falta de personal en varios departamentos. El dirigente recordó que “por muchos meses se hicieron consumos estimados y al usuario le vino una factura exagerada, y fue porque obviamente no teníamos personal para eso. Como sindicato pensamos que el usuario es el gran perjudicado”.
Castelgrande reconoció que el ente se encuentra “en pleno proceso de aplicación de nuevas tecnologías en las oficinas comerciales, donde de a poco se quiere sustituir el papel por los medidores inteligentes y que la factura llegue a los hogares por otras metodologías, como on line o por correo electrónico. Además, estamos muy expectantes por ver cómo se instalan los nuevos medidores inteligentes, que por un lado le harán bien a la población”.
