Las imágenes de TV lo dejaban en claro: en el Estadio 10 de Junio de Florida había público durante la disputa del partido entre Nacional y Peñarol por la primera fecha de la Liga Uruguaya. Y como era de esperar, la Secretaría Nacional del Deporte decidió ayer tomar algunas medidas, pocas horas después de que se prohibiera toda competencia amateur y solo se permitiera la continuidad del básquetbol y del fútbol profesional.
Por lo pronto, a través de un comunicado dejó en claro que recortará el número de autorizados para concurrir a los partidos, ya sean oficiales o amistosos, y anunció que pasará lo sucedido a la órbita del Ministerio de Salud Pública, que seguramente establecerá multas.
Pidió además a la Federación de Básquetbol “identificar toda persona que hubiese configurado infracción a las medidas precautorias dispuestas por el Ministerio de Salud Pública y protocolos sanitarios correspondientes a la competición”, y todas las personas identificadas serán incluidas “en la lista de personas impedidas a ingresar a espectáculos públicos”.
Por otra parte, remarcó que solo se permitirá desde ahora un ingreso máximo de 30 personas por club: 12 jugadores, nueve del staff técnico, un oficial de cumplimiento, dos oficiales de mesa, seis dirigentes y delegados titulares.
Por último intimó a los clubes al “cumplimiento estricto” de todas las medidas precautorias y los protocolos sanitarios establecidos para cada competencia, “bajo apercibimiento de aplicar sanciones previstas en la legislación vigente, sin perjuicio de la suspensión del torneo en disputa”.