“Los Arrayanes” volvió a destacarse en Día del Merino

La familia Fros recibe el premio, acompañado por el jurado y directivos de la Scmau.

Se concretó ayer en la Agropecuaria de Salto la 20ª edición del Día del Merino, destacándose nuevamente “Los Arrayanes” que obtuvo los dos mejores ejemplares de la muestra. De esta forma, la cabaña de los hermanos Fros obtiene el 13º campeón y el 17º mejor lote desde que inició la actividad la Sociedad de Criadores de Merino Australiano del Uruguay.
El Día del Merino es la fiesta de la raza, y en ella participan reproductores de primera línea. “Aquí se le brinda importancia singular a la información objetiva del mérito genético con los Deps”, señaló tras su trabajo de jurado el ingeniero agrónomo José Ramos, a quien acompañó Federico De Brum.
Explicó que se vieron animales que “están en el 1% superior de la raza para las principales características, para los tres índices de selección: afinador, lanero y doble propósito”. Y aclaró que la jura tiene un componente de información objetiva “muy importante, que es un 30% de apreciación y 70% de datos”.
El técnico del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), expresó que “el trío de animales que seleccionamos en el podio –2 carneros y un borrego–, son animales de punta que van en línea con la orientación que tiene la raza de mejorar rendimiento, afinar y meter peso en el cuerpo, generándose una muy linda actividad”.
El mejor ejemplar de la muestra “es 1% superior en los tres índices. Es -1,3 en diámetro; animal muy puro sin detalles en la pigmentación, y de apreciación; sin dudas el animal más destacado”.
El carnero de Los Arrayanes tiene 171 de Indice Afinador, 181 de Indice Lanero, 172 Indice Doble Propósito, 7,2% peso de vellón sucio, 14,7% peso vellón limpio, -1,3 de diámetro, 4,6% peso del cuerpo, 0,7 de margo de mecha, -0,5 coeficiente de variación.
“Datos espectaculares”, resaltó el profesional sanducero: “mejorador de rendimiento, mejorador del peso del cuerpo, un vellón muy blanco y que bajaba bien, por lo que en el balance de información objetiva y apreciación era el animal más completo”.
Para Federico De Brum son esos animales para llevarse al establecimiento. Recordó los comienzos hace 20 años, cuando el Día del Merino se inició “como un remate de carneros con datos para tratar de financiar las evaluaciones genéticas e imponer el uso de los Deps y los índices en la selección de los carneros”.
La evolución que ha tenido “es impresionante”, resaltó el jurado. “Hoy estamos viendo datos muy buenos. Animales que afinan entre 1 micra y 1,3 micras, y a su vez suben peso de vellón y de cuerpo, todo lo que se logra realmente con mucho trabajo, juntando trabajo científico y de investigación con los productores y seleccionando. Es de largo plazo, lleva su tiempo, pero cuando querés acordar te encontrás con este tipo de animales, y da gusto”, subrayó. Sobre si se debe seguir afinando el Merino, entiende que es una decisión “particular de cada empresa y productor. La ecuación económica es finura y kilos, y cada uno tomará su rumbo”. Y agregó que “poder afinar y ganar kilos, es una ventaja; hace algunos años atrás el animal que afinaba era chico y no pesaba nada”.

MUY CONTENTOS

“Al Día del Merino vienen animales con datos afinadores, y estar obteniendo los mejores ejemplares nos tiene muy contentos”, señaló tras la tarea del jurado, Álvaro Fros.
El titular de “Los Arrayanes” –junto a su hermano Alfredo– indicó sobre el mejor ejemplar de la actividad desarrollada ayer, que “es afinador, tiene muy buen dato de EPD para diámetro, y peso de vellón alto y muy buen rendimiento al lavado, características que se buscan hoy en día”.
Tiene además, “un Dep para peso del cuerpo positivo y alto. Está dentro del 1% del percentil de la evaluación”. Dijo que es un carnero “muy bien plantado, con muy buenas estructuras, buenas patas y una trasera con bastante carne, largo y despegado”.