“Abrakadabra”: cuando se unen la trova y el rap

Una imagen del videoclip.

Hace pocos días se publicó en YouTube el videoclip de una nueva canción creada en Paysandú. Se titula “Abrakadabra”, y tiene la particularidad de haber surgido de dos artistas muy diferentes: Ernesto Amir, un trovador, y Manso MC, tal vez el más destacado exponente del rap en Paysandú. La parte musical contó con el aporte de Matías Hernández –músico de extensa trayectoria, que tuvo a su cargo la grabación, la mezcla y la masterización del tema–, y con la participación del DJ Matusalén Kill (nombre artístico de Mateo Jaen). A ellos se sumaron además los músicos Pablo Reyes (teclado), Flavio Giordano (violonchelo) y –desde Salto– Naty Costa (violín).

Trabajo en equipo

El tema se inicia con la voz y la guitarra de Ernesto. Al comenzar la parte de rap, se escuchan palabras del poeta y músico riverense Chito de Mello (1947-2020), en lo que se presenta como “un pequeño homenaje que hicimos, para que esté y siga presente”. Según recuerda Ernesto, esa melodía inicial nació en diciembre de 2020, mientras arpegiaba unos acordes en el estudio “Cámara Escéptica”, de Hernández, cuando ambos trabajaban en la grabación del EP “Distantes”. Le comentó que le gustaría combinar esa idea con un género musical distinto al suyo, y Hernández le respondió que podía ser “un desafío lindo, y un aprendizaje”. “Una canción con el Manso estaría bueno, si se suma, le dije. Y su respuesta no demoró: ‘Aquel se suma enseguida’”. A partir de entonces, comenzó un proceso que pronto se convirtió en un trabajo en equipo.

Oriundo de Rivera, Ernesto ha seguido la trayectoria de Manso desde 2013, cuando llegó a Paysandú. “Fue y sigue siendo un artista al que admiro, porque dice, porque se baja del muro de la comodidad de la tibieza, porque corre el riesgo y la valentía de no caerle bien a todo el mundo, y porque no es fanático de los ‘me gusta’ en las redes. Yo soy igual, desde el arte que llevo adelante con la guitarra. Saber que uno no está solo en eso lo hace tener más ganas y valentía de seguir trazando el camino musical de decir ciertas cosas de determinadas maneras. Soy trovador, oriental, y un trovador debe saber que en su canción canta poesía, y que no debe estar ajeno al amor, las cuestiones sociales y la historia. Manso, desde su música encarna esos valores que para mí son importantes”. Tiene palabras de admiración también para el trabajo de Matías Hernández, quien actualmente está a cargo de la producción del “Espalda con espalda”, un nuevo disco de Ernesto. Y a Matusalén Kill lo conoció a través de Manso, “porque están trabajando juntos hace un tiempo. Les puedo asegurar que los temas que están produciendo van a dar que hablar más allá de Paysandú. Mateo se sumó enseguida, y puso su magia y el poder a ‘Abrakadabra’”.

La realización del videoclip estuvo a cargo de Christian Fernández, “Temujín”, a quien define como “el mago de las imágenes, que ve donde otros no ven, lo que otros no imaginan. Un tipo joven, humilde y laburante. Se encargó del videoclip de punta a punta, y su ansiedad se acopló a la de todos. Sé que con él vamos a trabajar en el futuro”.

Hablan los creadores

Amir quiso que el resto del equipo diera su testimonio de esta experiencia artística. En el caso de Manso, dice que se había alejado de la canción contestataria porque me parecía que ya no le encontraba mucho sentido. “Pero ‘Abrakadabra’ me devolvió esa energía de decir cosas para la gente, para el pueblo, para los políticos y para quien le quepa el sayo. Volverme a encontrar con esa lírica y retomar la canción de protesta me hizo muy bien, y me hizo dar cuenta de un montón de cosas de las que por ahí uno, muy cegado en lo suyo, no llega a ver. ‘Abrakadabra’ me devolvió eso de vuelta y estoy muy agradecido. Tremendo laburo y equipo”. Trabaja desde hace años con Matías, en los últimos tiempos ha trabajado con Mateo, y celebra haber creado este tema junto Ernesto. “La verdad, sin palabras. Un placer hermano. Esto recién empieza, pero ojalá podamos seguir haciendo muchas más cosas”, expresa convencido.

Matías Hernández, por su parte, dice estar impresionado al ver “que se pueden hacer cosas colectivas y llegar a un acuerdo. Eso no es fácil en el mundo artístico. Tiene que existir, sobre todo, respeto entre los integrantes. Después, me aportó mucho, en lo que es juntar varias cabezas, que Cámara Escéptica haya sido el centro de todo eso”. Para Matusalén Kill, “‘Abrakadabra’ es libertad, es esperanza. Somos los hijos de los obreros de la clase media haciendo música; somos soñadores y entregamos nuestro corazón. ‘Abrakadabra’ es magia”.
Christian Fernández, por su parte, dice que todo el proceso de creación fue “como una simbiosis, un conjunto de artistas retratando una realidad, más que una crítica social. Mi aporte estuvo ligado a retratar a través de lo visual, con una simbología de lo que la gente ya sabe pero no se atreve a decir por miedo, o falta de medios que apoyen pensamientos ligados a lo más sensorial que radica en el propio individuo”.

“Abrakadabra”, dice Ernesto, “es más que un amuleto, más que una sanación, más que una protección, que un llevar nuestro fuego hasta el final. Es y será siempre la prueba de que se pueden decir cosas entre varios corazones bajo una idea que represente un mismo sentir. ‘Abrakadabra’ ya no es nuestra, pero mientras lo fue, lo disfrutamos y aprendimos. Ahora ella sabrá sonar sobre los cielos que elija volar”.

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