Colectivo ambientalista de Guichón señala “desprolijidades” en Ministerio

En un comunicado dirigido a la opinión pública el colectivo de Guichón por los Bienes Naturales se expresó sobre dos acercamientos mantenidos recientemente con autoridades del Ministerio de Ambiente, instancias entre las que marca un contraste.
“Hace algunas semanas nuestra organización mantuvo una importante reunión con Gerardo Evia, director Nacional de Biodiversidad y servicios Ecosistémicos del Ministerio de Ambiente. Pudimos intercambiar sobre temas que nos preocupan del Área Protegida Montes del Queguay, donde el jerarca nos informa que se está en la etapa final de la designación de un Guardaparque. También hubo compromiso de activar lo antes posible el funcionamiento de la CAE (Comisión Asesora Específica), fue una instancia fructífera generada por el director y el encargado del área Francisco Bergos”, señalaron.
No obstante, en el comunicado ponen de manifiesto que no ocurrió lo mismo con la visita del subsecretario, Gerardo Amarilla, que en estos días ha estado en Paysandú. “A contrapelo de lo antes expresado, debemos decir que nos sorprende y nos preocupa el accionar del subsecretario del Ministerio de Ambiente Gerardo Amarilla, que en estos días llegó a nuestro Municipio y no generó espacios de intercambio con la sociedad civil, donde claramente ningunea nuestro trabajo”, afirmaron.
Para el colectivo “esto confirma nuestra idea de que en el flamante Ministerio de Ambiente hay dos ministros, dos gestiones”, agregaron.
A continuación enumeraron problemas locales en los que entienden se debería trabajar. “Hay problemáticas urgentes de la que no estamos ajenos y siempre nos han encontrado comprometidos, abiertos al diálogo y al aporte constructivo. Como por ejemplo el vertedero municipal, las fuentes de agua, el uso indiscriminado de agrotóxicos. Todas estas situaciones afectan la salud de nuestra comunidad”, detallaron.
Señalaron además que “en lo que refiere a la gestión del área protegida, pedimos a Gerardo Amarilla que devuelva el vehículo que estaba destinado a prestar servicio específico en esta área del SNAP y que se había conseguido comprar con apoyo de recursos internacionales a través de Naciones Unidas”. Y advirtieron que “estas desprolijidades llevadas adelante por este jerarca hacen peligrar que en un futuro vengan nuevos apoyos”.