El Sindicato de Trabajadores de la Educación Privada (Sintep) convocó a la Fundación A Ganar a una instancia de negociación ante la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), en representación de los trabajadores de los ocho centros CAIF, donde plantearon aspectos relacionados a la nueva gestión. Un nuevo encuentro quedó planteado para el próximo martes con la posibilidad de invitar a un representante de la Intendencia de Paysandú.
“Desde finales del año pasado, los trabajadores de los centros educativos iniciaron una transición y esperamos que ese proceso se terminara porque estaba la relación de dependencia de esos trabajadores con la Intendencia. Con la presencia de la fundación, que entendemos es el empleador, llevamos esta instancia adelante que estuvo bien porque hubo recepción de los planteos”, dijo a EL TELEGRAFO el secretario de Asuntos Laborales del sindicato, Pablo Abisab.
Explicó que durante el encuentro, “algunos aspectos se relativizaron, pero para nosotros son importantes. Por ejemplo, la mayor parte de estas trabajadoras son mujeres jefas de hogar y en muchos casos es el único sustento. Por lo tanto, no es una cuestión corporativista mantener el trabajo, sino que es fundamental. Además, es importante que las trabajadoras y los equipos técnicos continúen porque son parte de las vidas que se atienden en los centros educativos”.
Para aclarar
Abisab señaló que “hay cuestiones que no están claras. Por ejemplo, quién es el empleador. La fundación dice que gestiona los recursos humanos y tiene el ejercicio de la potestad disciplinaria y la administración. La Intendencia tiene la gestión operativa, la logística y es responsable de la parte pedagógica. No nos termina de cerrar y yo ponía un ejemplo en la reunión. Si es la Intendencia que tiene a su cargo la orientación pedagógica y la fundación a cargo de la potestad disciplinaria, entonces quién me orienta en mi tarea docente”.
El dirigente informó que “la fundación admitió que había algunas cosas para trabajar porque está claro que no hay claridad sobre quién es responsable de una cosa y quién de la otra”.
La Intendencia no estuvo presente en la instancia, “pero el Sintep convocó a quienes entendemos que son los empleadores a partir del contrato firmado con la Fundación A Ganar”.
Sui géneris
Durante el encuentro por zoom, “la fundación explicó que la situación planteada era sui géneris. No es una modalidad entendida, pero el sindicato sostiene que no se puede ir viendo sobre la marcha porque, mientras tanto, hay que ver lo que ocurrirá con los trabajadores. Y en el caso de que un funcionario no haga bien su tarea, debe definirse quién lo evalúa. Si son supervisores de la Intendencia o la fundación. La semana próxima habrá una nueva instancia bipartita en la que podría participar la Intendencia”.
El docente precisó que, entre otros aspectos, “hay varias cosas como las garantías para los trabajadores y la permanente incertidumbre que viven, teniendo que renovar los contratos. Esos contratos establecen que habrá una evaluación para la continuidad en los centros. Preguntamos sobre las características de las evaluaciones y quiénes evaluarán. Si será la Intendencia o la fundación y si evaluarán toda la tarea o puntualmente lo que hará una educadora o el desempeño del equipo técnico”.
Abisab subrayó la necesidad de “negociar, pero tiene que haber ciertas garantías. No se puede pensar que lleguemos a fin de año y atravesar por la misma situación que el año pasado. Además, en los CAIF trabajamos con niños y adolescentes que vienen desde los sectores más vulnerables de la población y los docentes realizan una tarea en situaciones complejas. Por eso, el ambiente laboral debe ser sano”.
Explicó que “otras cuestiones consideradas tienen que ver con los contratos de trabajo y algunas características que exceden las potestades del empleador y exceden la responsabilidad de los trabajadores. La fundación tiene una visión y nosotros, otra. Pero eso es parte del proceso de negociación”.
No son inamovibles
Abisab precisó que “para la fundación no hay inamovilidad, porque explicaron que cualquier trabajador de una empresa privada no tiene garantizada su permanencia. Pero esas son políticas de Estado y podemos diferir. Por supuesto que discrepamos con las tercerizaciones en la enseñanza y, por el momento, no podemos cambiarlas. Tampoco afirmamos sobre la inamovilidad, sino que pedimos ciertas garantías”.
Durante la instancia de negociación “quedó claro que trabajadores con muchos años de trabajo en los CAIF. Por eso cuestionamos hasta cuándo se evaluará su desempeño. Hay sicólogos que tienen la historia de la familia de un niño. Hay procesos educativos y de cuidados”, concluyó.