La Asamblea de la Liga de Fútbol decidió anoche que no haya competencia en la Divisional C, que contaría solo con cinco equipos (la reglamentación indica que debería tener un mínimo de seis), por lo que luego de intercambiar opiniones entre neutrales y clubes, se decidió que la Divisional B absorba a esos cinco clubes.
Esa fue la primera moción planteada, y luego se puso sobre la mesa la posibilidad de que se pudiera jugar la C con cinco participantes, pero a la hora de votar la diferencia fue abrumadora a favor de la primera moción: 24 a 1.
Este año entonces la B sumará cinco equipos, restando definir la forma de disputa de la temporada, para lo que los clubes se reunirán el viernes a la hora 19.30, según quedó acordado anoche.
Ahora bien, al término de la temporada subirán cinco equipos a la Primera División, desde la que descenderán tres clubes.
La C no tendrá actividad hasta 2023, y se espera entonces que el próximo año la Primera División quede conformada por 14 equipos, y que sean 15 los que estén en la B.
Y además se estableció que por dos temporadas no ingresarán nuevos clubes.
Así, la Liga dio un paso más en procura de dejar todo listo para que la pelota comience a rodar en el fútbol mayor, en medio de singular expectativa tras el extenso parete.
