A través de la Rendición de Cuentas, que fue aprobada en la comisión y este lunes pasará al plenario de la Cámara de Diputados, el gobierno plantea la sustitución del Programa Uruguay Trabaja, bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), por el programa Accesos para mejorar la inserción laboral de los participantes.
Según la ley, el programa actuará “mediante convenios con organismos e instituciones públicas y privadas, generando las articulaciones necesarias para el acceso a programas de formación”. La iniciativa que desde esta semana estará en la cámara baja, plantea que en la primera fase el ministerio pagará el equivalente a un salario mínimo a los beneficiarios, pero no tendrá naturaleza salarial ni retributiva. En la segunda etapa, los privados seleccionados “asumirán la calidad de contratante del participante, recibiendo como reconocimiento de parte del Estado el sello anual de ‘madrina’ por el compromiso con la política pública de inserción laboral, el cual se hará público y se le dará la difusión correspondiente”.
Esta contraparte privada se encargará “del pago de las cargas legales asociadas a las contrataciones, pudiendo estar exoneradas de los aportes patronales a la seguridad social por las contrataciones realizadas en el marco del Programa, sin perjuicio de otros beneficios que se otorguen por ley o por acto administrativo, según corresponda”.
Con el objetivo de apoyar la inserción laboral de los participantes en el programa Accesos, los privados accederán a la exoneración “total o parcialmente por hasta un máximo de doce meses los referidos aportes patronales a la seguridad social”. Sin embargo, el texto aclara que las obligaciones contraídas por Uruguay Trabaja “se cumplirán hasta su finalización, sin que sea posible prórroga alguna”. La postulación de los participantes, plazos y duración de cada fase se conocerán en la reglamentación del Poder Ejecutivo.
Hay interesados
El director departamental del Mides, Ignacio Ifer, señaló que “Accesos está en etapa de elaboración y en Paysandú realizamos el relevamiento interno para dar los insumos a quienes arman el proyecto. Hacemos los acuerdos con el sector privado para saber cómo continuarán los participantes después de estar en el programa”.
Reconoció que “Uruguay Trabaja había dejado de ser hace mucho tiempo un instrumento de desarrollo socio-educativo para justificar sueldos a través de la prestación de un servicio. Porque una vez que cada participante culminaba su período laboral, se iba para su casa y volvía al ministerio para ser asistido a través de canastas o de la Tarjeta Uruguay Social”.
En Accesos “vemos las tres patas que tiene el programa y le agregamos una más. La socio-educativa ya la tenía pero queremos reformarla porque no se puede pensar siempre en lo mismo. Es decir, enseñar a pintar paredes o hacer trabajos de albañilería. Y lo vemos al revés, porque queremos saber qué necesita el sector privado para tomar a personas que participan en nuestros programas”.
El inicio de la nueva propuesta “sería lo más parecido a Uruguay Trabaja con ese componente socio-educativo, porque planificamos los cursos de capacitación. En este sentido, nos reunimos con el Pit Cnt en la Mesa Intersectorial de Políticas Sociales (MIPS) para captar cursos que nunca se hicieron, porque no salimos de los mismos de siempre”, dijo a EL TELEGRAFO.
Accesos “no será una cola para anotarse como ocurre con Uruguay Trabaja, sino que se hará desde otros programas que tenemos en el ministerio donde nuestros asistentes sociales hacen un seguimiento y conocen el perfil del individuo que busca trabajo y no consigue pero ve sus capacidades en determinadas áreas. Sobre esas áreas se brindarán cursos y con los acuerdos generados con privados veremos la posibilidad de un estilo similar a las pasantías, con la posibilidad de quedar en la empresa”.
Ifer aseguró que “el sector privado está interesado en la propuesta. Y la estigmatización sobre el ministerio existe porque este ministerio no fue creíble durante mucho tiempo. Realmente no se veía que todo lo que el Estado vuelca en el Mides, tuviera frutos. Si los privados empiezan a conocer a los emprendedores del Programa Ruralidad, por ejemplo, y comienzan a tener incentivos para las contrataciones, entonces el programa empezará a cumplir sus objetivos”.
