Danubio quedó eliminado en El Metro capitalino, y rápidamente solucionó su incorporación a Allavena para afrontar el torneo de Primera División del básquetbol sanducero. El argentino Martín Chervo llegó anoche, fue a la sede vaticana, firmó en la Liga y luego se puso a las órdenes del cuerpo técnico. “El sábado terminamos con Danubio, quedamos afuera en tiempo complementario ante Stockolmo, (ayer) llegué hace media hora, y calculo que para mañana estaré habilitado (para afrontar nada menos que el clásico ante Pelotaris). Sé que es el torneo local, que son pocos equipos pero que al ser un lugar chico le ponen mucha pasión y se lo toman muy en serio”, dijo apenas arribado a Paysandú, en diálogo con EL TELEGRAFO.
El jugador tiene en claro que “tengo que tomar la responsabilidad que me pida el entrenador”, según dijo mientras esperaba por “conocer a los compañeros”.
“Seguramente vamos a tener una charla con el entrenador para conocer su forma de trabajo y tratar de hacer lo mejor por el club. ¿Con qué jugador se va a encontrar el hincha de Allavena? Con un aguerrido, apasionado por lo que hace. Espero dar un buen espectáculo. Y el triunfo… me gusta ganar a lo que juegue”, remarcó.
Chervo, que a través de la virtualidad transita el último tramo del profesorado de Educación Física, puede resultar clave en los vaticanos. Y mientras, vive su experiencia internacional. “Estoy en Uruguay, y cuando termine acá me voy a Chile. En Allavena estaré hasta diciembre, y luego jugará en el chileno Puente Alto”, contó mientras observaba el movimiento de las formativas, y era requerido para algunas fotos.