Pese a la ayuda de la lluvia, el incendio continúa dando trabajo en zona de Algorta, Orgoroso y Piedras Coloradas

En la capilla “Tú eres Pedro” de Piedras Coloradas, el presidente felicitó personalmente a los bomberos que se encontraban descansando tras ser relevados por otros compañeros.
El presidente Lacalle Pou y Alvaro Delgado arribaron a las 14.15 de ayer a Piedras Coloradas.

La caída de agua que se registró en la víspera en el departamento se vivió como un alivio para quienes desde hace tres días batallan contra las llamas del incendio provocado por un vehículo en la zona de Algorta, y que rápidamente –dadas las condiciones de sequía, déficit hídrico, árboles y vegetación– se propagó hacia la zona de Piedras Coloradas y Orgoroso, amenazando a los pobladores que temieron por sus casas y animales.
De acuerdo al último reporte brindado por el director nacional de Bomberos, Ricardo Riaño, a EL TELEGRAFO, cerca de las 21 de ayer la situación estaba controlada pero aún había focos en zonas calientes que requieren la atención cercana para evitar su reactivación.
“La lluvia aplacó mucho las llamas, pero quedan algunos focos calientes que están dentro del área quemada y lo que estamos haciendo es la etapa de liquidación. Esto pasa tanto en la zona de Algorta, Piedras Coloradas y Orgoroso, como en Tres Bocas en la ruta 24, donde tenemos que introducirnos en el área quemada y apagar los pequeños rescoldos, focos generados en troncos y braserío que todavía persiste. Si en la noche de hoy (por anoche) o mañana (por hoy) hubiera más lluvias, eso nos facilitaría la acción. De lo contrario, es un arduo trabajo porque la superficie quemada es tan amplia que apagar todos esos sectores humeantes o de braseríos lleva un fuerte trabajo. Hoy nos encontramos en una etapa de liquidación del incendio, donde realizamos tareas de remoción y enfriamiento”, dijo.
El incendio, declarado como uno de los más grandes en el país por el propio Riaño, demandó la labor incesante de personal efectivo y zafrales de Bomberos, incluso un grupo de refuerzo que llegó directamente desde Montevideo; cientos de voluntarios provenientes de las empresas forestales –que además pusieron a la orden vasta maquinaria–, de grupos como la Brigada solidaria Agustín Pedroza del Sunca, bomberos voluntarios de otros departamentos, vecinos y personas de otras localidades, demostró que en unidad las acciones logran ser más efectivas.
Siguiendo las indicaciones de los entendidos en la materia, las brigadas podían divisarse a lo largo de la ruta 90, en el tramo de 10 kilómetros que une a Piedras Coloradas y Orgoroso, y campo adentro; mientras otras tantas se encargaban de transportar agua, fruta y hasta baldes que pidieron para colaborar. Así se vio reflejado en la movilización que los sanduceros hicieron donando víveres en el destacamento local, desde donde luego eran redistribuidos hacia la zona más cercana, pero también para quienes combatían otro de los focos importantes en Tres Bocas, o quienes pusieron vehículos a disposición para los traslados.
La acción incluyó además un fuerte despliegue de personal e insumos de las intendencias de Paysandú y Río Negro, y de las alcaldías de Guichón, Piedras Coloradas y de Young.
“En 23 años que llevo en la profesión no tengo referencia de un incendio de tanta magnitud y superficie afectada. Sí hemos tenido incendios grandes en la costa pero con otras particularidades, pero no de superficies tan importantes, porque estamos hablando de 22.000 hectáreas”, dijo el director nacional de Bomberos.

“YA SE LLEGÓ TARDE”, DIJO LACALLE POU

Sobre las 14.15 del primer día del nuevo año, el helicóptero 042 de la Fuerza Aérea sobrevoló la zona afectada por el incendio. Minutos más tarde, en medio de un temporal de viento y cuando la lluvia comenzaba a caer casi en forma horizontal, descendió en un terreno cerca de las viviendas, tras lo cual el presidente Luis Lacalle Pou, acompañado por el secretario de Presidencia, Alvaro Delgado, fue recibido por el subjefe de Policía, William Pereira, que se encontraba en la zona efectuado coordinaciones. El presidente caminó sin escoltas hasta el alambrado donde los vecinos con sorpresa y curiosidad comenzaron a acercarse. Uno de ellos tomó confianza, le dio la mano y le preguntó: “¿Trajo el agua, señor presidente? La respuesta del mandatario fue corta y expresando un deseo: “Ojalá”. Allí hubo un momento distendido de saludos y agradecimientos por la magna visita, con el solitario reclamo de una mujer que desde atrás le reclamaba que perdiese el tiempo en fotos con la gente porque “Piedras Coloradas se está prendiendo fuego”…
Consultado por EL TELEGRAFO sobre cómo se veía la situación desde al aire, mientras los vecinos comenzaban a acercarse respondió: “lo veníamos viendo pegando la vuelta. Por suerte ahora está lloviendo bastante”. A un costado, mientras arribaba el intendente Nicolás Olivera y el secretario general, Fermín Farinha, Delgado comentó que “menos mal empezó a llover y eso enfría el suelo, pero se ve duro el incendio desde arriba, grande y con varios focos. Ojalá la lluvia y la ayuda de la gente colaboren para que esto quede en un desastre y no tome más consecuencias”.
La comitiva se trasladó hacia el centro polideportivo, donde se encontraban bomberos en descanso, y luego hacia Orgoroso para poder ver el lugar donde estaba más cercano el fuego. Una vez en conferencia de prensa, el presidente comentó que “entre lo que pasó y lo que está pasando por suerte hay una diferencia grande. La lluvia ha ayudado muchísimo. Estos días han sido de mucho trabajo, por lo que el agradecimiento a bomberos, bomberos voluntarios y a la gente de la zona con la solidaridad dando una mano”.
“Estuvimos viendo los cortafuegos, las partes quemadas, las que todavía están en cierto peligro y lo importante es la no afectación de viviendas, que no llegó a los poblados como se estaba esperando y no hubo que lamentar ninguna pérdida humana, aunque las pérdidas materiales va a ser bastantes grandes y eso será una evaluación posterior”.
Lacalle Pou indicó que los vecinos “nos pidieron un cuartelillo, más herramientas y dotación. Y es lógico, porque esta es una zona forestal y de riesgo, sobre todo en determinadas temporadas, por lo que nos volvemos con algunas cosas pendientes que para este caso ya se llegó tarde”.

HEBER EN LA ZONA

En la tarde del viernes, en tanto, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, había llegado para conocer la situación y valorar el trabajo que “viene siendo muy difícil debido a la cantidad de focos activos que hay”. Y destacó la misión que comandó la DNB, “de modo de proteger a los pobladores de Algorta, Orgoroso y Piedras Coloradas”.