Solicitada: Solo una opinión

En la edición de EL TELEGRAFO del día Domingo 26/6, aparecen dos notas, una sobre el Observatorio Gastronómico de carnes de caza y la otra sobre una denuncia sobre carne en mal estado utilizada en los comedores municipales para la elaboración de comidas.
En la nota gastronómica el principal auspiciante es la Intendencia Municipal de Paysandú, en la nota no se explica cuáles son los animales de caza que se utilizan. Existen varias especies en las que está prohibido su caza. Cuando existen controles de alta calidad para el consumo de carnes en nuestro país nos preguntamos: ¿quien controla la calidad y estado de estás carnes? Muchas especies de animales consumen en plantaciones plagadas de agrotóxicos, llama la atención que esto sea auspiciado por quién tiene la responsabilidad de ejercer el control.

En la otra nota aparece la directora de Promoción Social dando las explicaciones sobre los hechos que llevaron a formalizar la denuncia por las carnes utilizadas, las cuales estarían en mal estado, un hecho que se constata luego de elaborada y distribuida la comida. La directora relata los hechos pero nunca se expresa sobre los motivos por los cuales se origina este problema.

Queda en claro que no existe una persona que apruebe el menú una vez que está pronto y antes de su distribución.
El recipiente utilizado para depositar los alimentos antes de su elaboración no es el correcto, (ver foto publicada).
La Directora termina dando argumentos como el mejoramiento de los comedores, diferentes menú, comodidades emocionales, etcétera y cabe felicitarla por esto, pero el tema es de otro tenor “una falla en la cadena de insumos para la elaboración de alimentos”; más bien estás expresiones son una respuesta a la denunciante una confrontación de gestión.

En su última parte de la nota dice la Directora: “la carne no es de Paysandú y llega a través del INDA”, dejando en duda del estado en que llega la carne.
Creemos que caben los mismos conceptos que para la nota anterior; ocurre un hecho dentro de dónde están los instrumentos de control bromatológicos, controles estos aplicados en comercios elaboradores de alimentos y carnicerías de maneras muy estrictas (totalmente correcto y como debe ser).
En un Paysandú donde hoy se habla de un mega proyecto para la captación del turismo de alto nivel, seguimos teniendo personas políticas que carecen de conocimiento, capacidad, experiencia o idoneidad en los cargos que ocupan.
La nota deja en claro que la IdP debería tener un solo espacio para la elaboración de estos alimentos con toda la capacidad tecnológica, logística y recursos humanos.

Cuando hablamos de alimentación a personas de bajos recursos o personas que por diferentes motivos utilizan este medio, ¿existe un seguimiento de alimentación de las personas? Nos imaginamos que concurren personas que por problemas de salud deben tener regímenes especiales.
Creo que nuestro Paysandú está lejos de ser una capital del primer mundo, todavía nos faltan cosas por aprender, tener más visión de los problemas locales, problemas de nuestros ciudadanos, los de acá, de nuestra heroica.
Muchos de estos problemas arrastrados desde varias décadas y que se agudizan.

Un sanducero