La Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) retomó la marcación del surubí pintado, luego de dos años de verse interrumpida esta labor a raíz de la pandemia. Como hecho a destacar, en la oportunidad un pescador sanducero capturó un ejemplar extraordinario de 1,57 metros y 43 kilos de peso.
A propósito de esta campaña, EL TELEGRAFO dialogó con el presidente en funciones de la delegación uruguaya, Miguel R. Feris Grassi, quien explicó que “este trabajo se está haciendo desde hace años, por el tema de la pandemia se dejó de hacer y ahora se retomó, que es en la zona del puerto Yeruá, del lado argentino — frente al Hervidero–, y la desembocadura del Daymán sobre el río Uruguay”.
En la campaña de marcación de surubí pintado, “CARU trabaja con personal tanto uruguayo como argentino en equipo conjunto y además se invita a los pescadores tanto artesanales como profesionales a participar”, precisó. En esta ocasión, de acuerdo a información divulgada por el organismo, participaron “más de un centenar de pescadores y guías de pesca argentinos y uruguayos”.
Consultado respecto a qué propósito tiene este trabajo, el entrevistado indicó que “se apunta a tener información y un relevamiento de la fauna íctica, principalmente en este lugar, que en esta época, en invierno, ellos hacen un parate en esa zona”.
Asimismo, indicó que se aplican “nuevas herramientas tecnológicas para detectar los cardúmenes, pero al mismo tiempo se los pesa, se los mide, se hace todo un relevamiento de la fauna íctica en esa zona”.
En ese sentido, destacó la pesca del ejemplar de casi un metro sesenta y 43 kilos de peso, como lo más sobresaliente “hasta el momento”. El tamaño “llamó poderosamente la atención, pero siempre hay ejemplares de gran porte en esa zona”, reconoció.
El jerarca anunció que “en unos días se va a hacer la segunda marcación también en la misma línea”. De acuerdo al comunicado emitido por CARU, este trabajo se desarrolla por la institución “junto con investigadores del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep) de Argentina y la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) de Uruguay”, para obtener información sobre rutas migratorias y localización de las principales concentraciones.
Consigna, a la vez, que “entre el 21 y 30 de junio, la actividad se centró en la marcación intensiva de la especie surubí pintado (Pseudoplatystoma corruscans) en el área de veda establecida por la CARU”, siendo “fundamental para esta investigación que cada vez que un pescador capture un pez con esta marca” lo informe a través de la página web. “Si el pescador libera el pez, se solicita que tome una fotografía de la marca con el detalle del número. En caso de que la pieza no sea devuelta al agua, se solicita que conserve la marca. Una vez brindada la información, ya sea con la foto o con la marca, en ambos casos la CARU entregará una recompensa”, indica.
EL PESCADOR
El sanducero Santiago Baladao fue quien pescó el ejemplar extraordinario, en el marco de esta actividad de marcación de surubí. A propósito de esta experiencia, nos comentó que “ese día que pescamos, salieron dos grandes”, reconociendo que “de ese tamaño no es muy normal sacar”. Concretamente, “en la embarcación que estábamos, sacamos 2 de 24 kilos, salió uno de 8 kilos, y de 6 kilos, que eran los que más abundaban”.
“Fue mi primera experiencia, yo nunca había pescado un surubí”, reconoció. En esa zona en particular, y de acuerdo a la información que maneja por la experiencia de otros pescadores, “salen muchos dorados, pero más que nada hacia la represa”, comentó.
“Salgo a pescar regularmente en el río Uruguay, sobre todo en Paysandú”, relató. Participó de esta experiencia por primera vez tras recibir la invitación de un amigo en Salto, donde reside desde hace algunos años. “Nunca en mi vida había ido a pescar surubí y acepté”, contó.
Tiene experiencia en “la pesca normal en el río Uruguay”, de “bagres, algún dorado, alguna boga, y la clásica, cuando uno es chico, mojarrita. No soy profesional, más bien aficionado”, concluyó.
