Ajuste de carga en invernada en praderas permite usar eficientemente el forraje

Ante unas 1.000 personas de Uruguay y Argentina, fueron presentados datos de la investigación de la UPIC.

En sistemas de invernada basados en praderas convencionales, el ajuste de carga considerando la oferta de forraje de primavera permite un aprovechamiento eficiente del forraje a nivel predial, establece la investigación de la Unidad de producción Intensiva de Carne (UPIC), presentada en la 23ª jornada realizada en Paysandú. Cuando simultáneamente se utiliza la suplementación para cubrir el déficit de forraje otoño-inverno, la productividad aumenta en un 90% y el resultado económico mejora en un 138%.

Esto se constata aun cuando el precio de venta de los novillos en el sistema con suplementación es menor, ya que ese menor precio es compensado con el significativo incremento en productividad. La superioridad en el resultado económico de un sistema en relación al otro es consistente en diferentes escenarios de precios de ganado y costos de producción.
Los sistemas de invernada sobre pasturas sembradas en el país se caracterizan por una alta productividad en relación a aquellos sistemas invernadores sobre campo natural, debido a una mayor producción de forraje anual, estando esa superioridad en torno al 85%. La inclusión de las pasturas sembradas permite levantar la limitante del déficit de forraje invernal que caracteriza a la curva de distribución de forraje del campo natural, principal problema para animales en crecimiento y engorde.

Si bien esta ventaja comparativa de las pasturas sembradas durante el invierno para sistemas invernadores constituye una fortaleza para su incorporación tecnológica, la elevada concentración en la producción de forraje en primavera, plantea un desafío en términos de la utilización global del forraje a nivel de todo el sistema de producción. Esto ubica al ajuste de la carga estacional como una variable clave del punto de vista técnico, en la medida que el ajuste de carga invernal redunda en un exceso de forraje en primavera, y el ajuste, teniendo en cuenta la producción de forraje en primavera, si bien permite una mayor utilización del forraje anual, tiene como consecuencia directa un desbalance energético invernal.

La suplementación con alimentos concentrados constituye una alternativa para solucionar el referido desbalance, resultando en un aumento en la productividad de todo el sistema de producción. Sin embargo, esta opción implica un aumento de costos de producción que podría exponer al resultado económico de la empresa invernadora a las variaciones de precios, en particular a la relación precio del alimento concentrado-precio del ganado.

El objetivo del trabajo presentado en la jornada de UPIC ante unas 1.000 personas, es evaluar el impacto de la suplementación con alimentos concentrados sobre el ajuste de carga estacional, la productividad y el resultado económico en un sistema de invernada. Adicionalmente, se plantea como objetivo analizar la variabilidad del resultado en diferentes escenarios de precios de alimentos concentrados, de ganado y de implantación y mantenimiento de pasturas sembradas.
La información presentada en la UPIC, permite conocer que el ajuste de carga según la oferta de primavera, sumado a la modificación de la estrategia ganadera, permiten aumentar la productividad en un 90%. Mientras que con el sistema con ajuste de carga invernal se compran 298 terneros y se venden 292 novillos gordos (2% de mortandad), en el sistema con ajuste de carga primaveral más suplementación otoño-invernal, se compran 559 terneros y se venden anualmente 548 (2% de mortandad).

Los pesos de compra de ternero y de venta de novillos son los mismos en ambos sistemas. El ajuste de carga fue realizado de forma de evitar excedentes de forraje en primavera, mientras que el déficit de forraje invernal se cubre con el suministro de concentrado energético (grano de maíz).
Resulta interesante destacar que el aumento en la productividad es el resultado de un incremento en la carga promedio anual, ya que la ganancia media diaria anual resulta 15% menor. Esta mayor carga es resultado de una mayor cantidad de animales comprados y de la modificación de la estrategia ganadera, que implica una superposición de categorías (terneros cumpliendo un año y novillos de 2 años), en primavera, precisamente la estación de mayor producción de forraje. Esto implica un mayor aprovechamiento del forraje en el sistema de producción.