El Comité de Emergencia Agropecuaria se reunió este jueves, analizando los datos objetivos de varios indicadores y parámetros climatológicos, y también de la realidad de la oferta forrajera, los índices verdes y la disponibilidad de agua en el suelo, y la decisión fue declarar la Emergencia Agropecuaria en todo el país.
Así lo anunció el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Fernando Mattos en la víspera, indicando que “si hacemos los datos comparativos de esta misma altura del año, con relación a 2021, tenemos una relación de déficit mucho más acentuado y en una época que es bastante compleja, porque la primavera es una estación de gran desarrollo vegetativo, con una relación compleja de los cultivos, en la etapa final del llenado de grano de los cultivos de invierno, y estamos en una situación bastante crítica”.
El titular del MGAP sostuvo que la situación es compleja porque por tercer año consecutivo se declaró la emergencia agropecuaria. “Esto es un proceso acumulativo”, afirmó. Con la declaración, que abarca a los rubros de la agricultura, ganadería y la granja, se liberan los fondos agropecuarios de emergencia, que son recursos para asistir a pequeños productores familiares o productores de menos de 500 hectáreas con índice Coneat menor a 100, indicó Mattos.
Si bien reconoció que se registraron precipitaciones en algunas zonas del país, las mismas no son suficientes para “corregir el déficit estructural que tiene la situación forrajera, la situación de aguas subterráneas, y también los abrevaderos”, dijo el ministro. El año pasado, la emergencia agropecuaria abarcó 12 millones de hectáreas y más de 1.500 productores. Para este 2022, se calculan más de 16 millones de hectáreas.
La Dirección de Servicios Ganaderos definirá la posibilidad de habilitar el pastoreo al costado de las rutas, dependiendo si en la zona hay enfermedades infectocontagiosas, para salvaguardar las condiciones sanitarias del rodeo.
NO TODAS LAS ZONAS POR IGUAL
El Director de Descentralización, Luis María Carrese, manifestó por su parte que “entre la información recogida en el Comité de Emergencia Agropecuaria estuvo la situación de las distintas Seccionales Policiales de los diferentes departamentos, las zonas, el estado corporal del ganado, los informes climáticos del Inumet, la disponibilidad de agua en el suelo y otros parámetros. También estuvieron sobre la mesa en la reunión los antecedentes de los tres años de sequía que llevamos y la entrega de fardos de primavera y demanda en alza. Será la tercera consecutiva, pero no afecta a todas las zonas por igual”.
En cuanto a la entrega de fardos a los productores, para paliar el déficit forrajero que enfrenta el ganado, el Director de Descentralización, sin adelantar números, explicó a El País que “se viene a buen ritmo. Hay mucha demanda. Cada viernes recibimos la información procesada por el Sistema Nacional de Información Agropecuaria (SNIA) de quiénes son los que pueden solicitar y los que están aptos para recibir las ayudas. Deben ser productores familiares.
