El intendente de Salto, Andrés Lima, fue elegido por tercera vez consecutiva como primer vicepresidente del Congreso Nacional de Intendentes y luego de una larga discusión, el Frente Amplio resolvió ceder la presidencia del cuerpo –que le correspondía en 2023– por falta de acuerdos internos y por rechazo del Partido Nacional a la propuesta de una presidencia compartida entre Carolina Cosse y Yamandú Orsi.
La iniciativa, presentada por Lima, consistía en que el intendente de Canelones ocupara la presidencia por seis meses y los restantes seis, asumiera la intendenta de Montevideo. Los representantes nacionalistas no aceptaron el planteo y, luego de varios cuartos intermedios, propusieron al intendente de Flores, Fernando Echeverría, quien finalmente fue electo para el próximo año.
“Se presentó la propuesta del Frente Amplio que era una presidencia compartida y tanto el Partido Nacional como la coalición no estuvieron de acuerdo. No había un Plan B, era seis meses cada uno y, frente a ese escenario, lo peor que podía pasar era dejar el congreso descabezado”, dijo Lima a EL TELEGRAFO.
Luego de manejar otras variantes, “el Frente Amplio termina cediendo la presidencia y fue elegido Fernando Echevería, de Flores. En mi caso, continúo por tercera vez como primer vicepresidente en representación del Frente Amplio y asumió Richard Sanders, de Rivera, como segundo vicepresidente”. Sin embargo, algunos sectores plantearon a Lima para la presidencia, “pero no fue la posición mayoritaria” dentro del Frente Amplio.
Por su parte, Orsi escribió en su cuenta de Twitter que “resolvimos entre los tres ceder la presidencia del Congreso de intendentes al PN, ya que la propuesta del FA de compartirla no fue aceptada (aunque haya antecedentes). La esencia de la política son los acuerdos, y a partir de ellos resolvimos”.
Acuerdos
Lima evaluó que este año “se pudieron acordar cuestiones que venían desde muchos años en discusión. Los ejemplos más claros son la unificación del régimen de multas que se discutía desde 2016. En 2022 también se puso definir el trabajo en conjunto entre el congreso y el programa Avanzar, con los realojos de las familias que viven en asentamientos. Con el Ministerio de Desarrollo Social se instrumentó un hogar universitario en Montevideo con capacidad para 180 estudiantes. La idea es que se ponga en funcionamiento el año próximo y las intendencias haremos el llamado a los interesados para definir los jóvenes que van a concurrir. En el caso de Salto son 10”.
El congreso acordó con el Instituto Nacional de Estadísticas el trabajo para el censo de 2023, con la integración de las comisiones departamentales. “También nos pusimos de acuerdo con el Ministerio de Ganadería por las situaciones de emergencia hídrica y los recursos que se volcarán a las intendencias que hacen la limpieza de tajamares con maquinaria propia. Este año acordamos con UTE la iluminación de los estadios de Primera División y de Baby Fútbol, así como la forma en que el gobierno nacional distribuirá los fondos de asimetrías”.
En 2023
Lima resumió que el próximo año “resta definir el programa Oportunidad Laboral en su tercera edición, el comienzo y los plazos de extensión, así como los jornales que aportarán las intendencias. Hoy es un 25% del total a cargo de las intendencias y el 75% lo aporta el gobierno nacional”.
Está pendiente el Runaev (Registro Único Nacional de Alimentos, Empresas y Vehículos). “Unifica la bromatología bajo una única legislación en todo el país. Hay 19 reglamentaciones y dificulta a los comerciantes que quieran vender por las diferencias en las exigencias y las reglamentaciones. Queda, además, la instrumentación de un fideicomiso que se contratará para que los mil millones que corresponden al fondo de asimetrías, lleguen a las intendencias en 2023. En la Rendición de Cuentas se votó para que se entreguen cuatro partidas de 250 millones de pesos cada una. Pero propusimos que, en vez de cuatro cuotas, se pague al contado y para eso existe la herramienta jurídica del fideicomiso”.
El congreso considerará la propuesta de modificar la edad para conducir, presentada por el intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, así como la decisión de unificar la libreta de conducir por puntos.
“Las tres intendencias del Frente Amplio no estamos de acuerdo en la propuesta de Vidalín de bajar de 16 a 15 años porque no hay muchos antecedentes a nivel de derecho comparado con otros países. Uno de los fundamentos escuchados es que los jóvenes puedan trabajar a partir de los 15 años y tener un medio de locomoción”. Explicó que “el problema es que en Uruguay no se puede trabajar a partir de los 15 años. Habría que modificar primero la legislación laboral y la legislación civil que establece la responsabilidad de los jóvenes. Por el momento, hay que trabajar en generar conciencia. Además, desde 2021 vienen creciendo los fallecimientos de jóvenes en accidentes de tránsito en comparación con el 2019, o sea, antes de la pandemia. Es muy importante el trabajo de concientización que realizan las direcciones de tránsito de cada intendencia en las escuelas y liceos”.