El incendio ocurrido en parte de una estancia de Forestal Caja Notarial, a siete kilómetros y medio de Algorta, en Río Negro, que finalmente alcanzó una superficie total de 75 hectáreas, fue declarado en la tarde de ayer “en etapa de liquidación”, dijo a EL TELEGRAFO el jefe de la Región I de la Dirección Nacional de Bomberos, comisario Juan Desiderio.
Asimismo confirmó que “en una primera evaluación realizada por personal de pericia, se estima que el incendio se inició debido a un factor accidental. Se estima que se estaría trabajando en el lugar y algún elemento combustible causó el incendio. Igualmente, se continúa la investigación”.
En cuanto al combate del incendio propiamente dicho, que esté en etapa de liquidación “no quiere decir que esté totalmente extinguido, de hecho tenemos puntos calientes dentro del área quemada. Es una tarea muy ardua, muy tediosa e implica apagar todos, absolutamente todos los focos humeantes que tenemos dentro del terreno y el área afectada. De hecho, cuando encontramos una zona humeante, se hace una nueva remoción, se extingue y se avanza”, destacó Desiderio.
Tras detectarse en la tarde del miércoles, “se continuó trabajando toda la noche tratando de extinguir el área afectada, que finalmente se extiende por unas 75 hectáreas aproximadamente. Entonces el incendio quedó controlado. La siguiente etapa es la de su liquidación”.
“Por supuesto, no podemos apresurarnos, por lo que” anoche permanecieron “piquetes de vigilancia en la zona afectada, preparados para una rápida respuesta”. Si todo continúa sin inconvenientes hoy viernes “se darán por terminadas las operaciones”.
Juan Desiderio subrayó que el incendio pudo alcanzar un área bastante mayor, desde que el viento de sur a norte impulsaba las llamas hacia áreas de Paysandú densamente forestadas. Pero fue fundamental para su rápido control “ese trabajo coordinado y conjunto, la respuesta rápida por aire y tierra”. Tras la alerta, “no dudamos en disponer de todos los recursos, vehículos de Bomberos, empresas privadas, los gobiernos departamentales de Paysandú y Río Negro, avionetas, helicópteros. Se movilizó todo para evitar que pasara a mayores y se logró”. De Montevideo, llegaron “37 funcionarios, 4 oficiales, 31 funcionarios, 1 clase y 1 chofer y se encuentran aún en la zona siniestrada, trabajando sin descanso”.
Además, indicó que la Sociedad de Productores Forestales “tiene un número muy importante de cámaras de detección, instaladas donde antiguamente había torres; esa nueva tecnología es clave en áreas forestadas”.
El incendio fue calificado como “de proporciones”. “Había líneas de árboles que fueron quemados, una amplia zona de rastrojo, pero se pudo evitar su avance a otros montes forestales en pie, y de madera preparada para su traslado a las plantas de celulosa”.
“La evaluación primaria es positiva, hemos mantenido un intercambio con las empresas privadas así como con los organismos públicos y fue la opinión general, ante un trabajo realizado con mucho esfuerzo, rapidez y contando con todos los recursos posibles”, indicó el director de la Región I de la Dirección Nacional de Bomberos.
