Sesionó anoche la Junta Departamental de Paysandú, retomando la sesión ordinaria del 27 de abril, que quedara trunca cuando se retiraron de sala los funcionarios de la corporación. En la sesión de la víspera se puso a consideración, entre los asuntos entrados, la declaración de interés departamental las jornadas sobre derecho de familia a realizarse el 9 y 10 de junio en Paysandú, lo que resultó afirmativo. Además, la Comisión Honoraria de Desarrollo Apícola solicitó que se declare de interés departamental el Día Mundial de la Abeja, evento que se desarrollaría en nuestra ciudad los días 19 y 20 de mayo, pero que por razones climáticas cambia de fecha.
En lo que concierne al orden del día, ingresó un informe de la Comisión de Descentralización, sobre la situación de vecinos del municipio de Tambores, quienes reclaman por una obra en la que una calle quedó mal hecha. El edil Emerson Arbelo, de la bancada del Frente Amplio, argumentó al respecto que las respuestas brindadas por la intendencia “son inadmisibles, porque aducen que no pudieron localizar a los vecinos que están reclamando por el tema. Quedó la calle alta, pues el agua se mete en la casa de los vecinos, por lo que la obra no quedó correcta. Es una obra que quedó mal hecha y genera un perjuicio a los vecinos. Se arregló la calle, que fue levantada, pero no se hicieron canaletas, por lo que el agua se mete”.
Persecución política
En lo que fue el tema que se llevó la mayor parte del tiempo del debate en la sala, se trató lo denunciado por ediles de la bancada frenteamplista, referido a la percepción de una persecución política de funcionarios en la Intendencia. Al respecto, el edil Andrés Imperial ya había manifestado que existían traslados de puestos de trabajo, recortes de horas extra, inhábiles y destratos por parte de los jerarcas responsables de las distintas direcciones hacia funcionarios identificados con la oposición. Durante el debate, el edil del Partido Colorado, David Helguera, mencionó que en el período anterior “sucedió algo parecido y no nos dieron pelota”, y que en aquel momento era algo “bien notorio”. El representante del Partido Nacional, Javier Pizzorno, argumentó en la misma línea: “entiendo totalmente fuera de lugar la media hora previa donde se dice que hay funcionarios perseguidos” dijo; “esta administración aplicó alguna reprimenda a funcionarios, porque los funcionarios están al servicio de la intendencia, pero de ninguna manera refiere a persecuciones por motivos políticos” agregó, y cerró diciendo que “deberían presentar pruebas y no hacer politiquería barata”.
Desde la bancada opositora, la edila Verónica Villareal dijo estar “asombrada por la forma arbitraria con la que se maneja el presidente de la Junta y la bancada oficialista”. “¿Para qué venimos a este recinto sino a debatir?” Los ediles Emerson Arbelo y Andrés Imperial argumentaron que se votaba afirmativo para que se hagan los oficios correspondientes “porque nos consta que hay persecución, no sólo desde el ejecutivo, sino desde las alcaldías: no se les otorgan horas extra o viáticos a ciertos funcionarios, pero sí lo hacen con sus correligionarios”.
La edila Mabel De Agostini manifestó que está sufriendo persecución por parte de la Dirección de Cultura, y dijo tener “suficientes motivos para decirlo”, lo que ameritó la intervención del edil Javier Pizzorno, quien dijo que “hay cosas que no se pueden considerar persecución”. “Es un disparate que digan que se los mira bien o mal, ¿hay que mirarlos sonrientes después de los disparates que se dicen en sala?”
La sesión finalizó luego de que la bancada del Partido Nacional mocionara la votación del artículo 63 del reglamento interno, lo que llevó al levantamiento de la sesión, por lo que quedó aplazado el tratamiento de otros asuntos.