El Instituto Nacional de la Leche (Inale), divulgó datos de las principales regiones exportadoras de leche, comparadas con el mismo período de 2022. En lo que va del año, tres regiones aumentaron su producción: Unión Europea, Estados Unidos y Nueva Zelanda. Por otra parte, la producción de Australia y Argentina cayó.
De acuerdo a la información que reproduce TodoElCampo, en la Unión Europea, la producción de mayo de 2023 cayó 5,3%. Sin embargo, si se observa el acumulado enero-mayo aumentó 3,1% y el acumulado de los últimos 12 meses aumentó 1,8%.
En Estados Unidos, la producción de junio de 2023 se mantuvo. Asimismo, el acumulado enero-junio aumentó 0,7% y el acumulado de los últimos 12 meses aumentó 0,7% también. En Nueva Zelanda, la producción de junio de 2023 cayó 1,7%. Sin embargo, si se observa el acumulado enero-junio aumentó 2,8% y el acumulado de los últimos 12 meses cayó 0,5%. En Australia: la producción de junio de 2023 aumentó 1,6%. Aunque, si se observa el acumulado enero-junio cayó 1,2% y el acumulado de los últimos 12 meses cayó 3,2%.
En Argentina, la producción de junio de 2023 cayó 0,9%. Asimismo, también el acumulado enero-junio cayó 0,4% y el acumulado de los últimos 12 meses aumentó 15,1%. Se aclara que en el periodo de la UE, se considera desde enero-mayo debido a la disponibilidad de datos.
RIESGO DE ALIMENTOS A BASE DE CÉLULAS
La FAO publicó recientemente un documento de síntesis sobre los riesgos de los alimentos a base de células, con 53 peligros potenciales identificados para la salud humana.
Es curioso que suceda, porque en un mundo que en el discurso y en las actividades humanas se apuesta decididamente a lo natural, cuando se trata de alimentos parece no importarle, y opta por sustitutos que desde la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), se advierte sobre la inseguridad y peligro que dichos alimentos generan en sus consumidores.
European Livestock Voice, sitio web europeo que aborda el papel de la agropecuaria, informó sobre la elaboración de leche artificial, sin vacas, que los agricultores advierten se trata de productos diseñados con procesos de fabricación mucho más similares a los de los productos farmacéuticos.
Además, recuerda la posición de la FAO: una mayor investigación con estudios más profundos para establecer un sistema que garantice la seguridad de los productos alimenticios a base de células y comprender si se pueden obtener los supuestos beneficios en el aumento de la sostenibilidad.
El artículo sostiene que la leche, que ya tiene muchas alternativas vegetales gracias al lobby vegano, ahora se enfrenta a otro sustituto artificial que intenta reemplazarla. De hecho, la leche sintética parece estar bien encaminada, incluso por delante de la producción sintética de carne o pescado. Muchos habrán oído hablar de la carne y el pescado cultivados, pero ahora tenemos leche cultivada en laboratorio producida sin vacas, cabras u ovejas. Israel se ha convertido en uno de los primeros países del mundo en vender productos lácteos artificiales.
El pionero israelí de productos lácteos alternativos Remilk es una startup de tecnología alimentaria fundada en 2019, con el objetivo de construir la instalación de fermentación de precisión más grande del mundo para producir “lácteos libres de animales” en Dinamarca (ahora en pausa).
El Ministerio de Salud de Israel permitió a la compañía Remilk vender sus productos lácteos cultivados en laboratorio al público, la compañía ya está produciendo a escala industrial en varias áreas del mundo. El proceso de inserción del gen de la proteína de la leche en biorreactores para un crecimiento acelerado es similar al utilizado para casi todos los alimentos basados en células.
En la práctica, el método utiliza levadura de la industria cervecera y panadera para fermentar proteínas de leche químicamente idénticas que los fabricantes pueden convertir en leche, queso y yogur. Pero quedan muchas, muchas dudas sobre tales alimentos sintéticos. Los agricultores y otros actores de la cadena alimentaria dudan de que tales productos puedan considerarse alimentos, ya que son productos diseñados con procesos de fabricación mucho más similares a los de los productos farmacéuticos y, en este contexto, deben evaluarse.
ADVERTENCIA DE LA FAO
Debido a las preocupaciones planteadas sobre los nuevos productos, la FAO publicó recientemente un documento de síntesis sobre los riesgos de los alimentos a base de células, con 53 peligros potenciales identificados para la salud humana.
Entre estos riesgos, el uso de factores de crecimiento como las hormonas, la deriva genética y la proliferación de células cancerígenas son motivo de gran preocupación.
En sus conclusiones, la FAO aconseja una mayor investigación con estudios más profundos para establecer un sistema que garantice la seguridad de los productos alimenticios a base de células y comprender si se pueden obtener los supuestos beneficios en el aumento de la sostenibilidad. → Leer más