Bajo la consigna “Basta de humo. Contra el modelo de la desigualdad”, el Pit Cnt organizó un paro parcial de 9 a 13 horas a nivel nacional, donde reclamó aumento “real” de salarios, reducción de la jornada laboral y “trabajo de calidad”.
En Paysandú, el acto central se realizó en la explanda de la planta de portland de Ancap y al finalizar, una caravana se trasladó al Palacio Municipal, con el fin de entregarle al intendente Nicolás Olivera un documento donde plantean preocupaciones sobre el desempleo en el departamento y la necesidad de defender la industria cementera.
“Se enmarca en una definición del Pit Cnt contra un modelo que genera desigualdad. Denunciamos que hay un proceso de achicamiento del Estado y también de desmantelamiento de las empresas públicas. Dentro de ellas, la industria del portland. Y, más allá de las consecuencias de la privatización a través de una asociación con Ancap, hablamos también de lo que generaría con las pérdidas de empleo de cientos de trabajadores. Teniendo en cuenta que la agenda del Pit Cnt abarca la décima ronda de consejos de salarios con casi un millón de trabajadores que hoy discuten su convenio colectivo”, dijo a EL TELEGRAFO el presidente del Sunca a nivel nacional, Richard Ferreira.
“Esperamos, en definitiva, lo que anunció el gobierno. Y es que el 12 de setiembre finaliza una etapa y se abre la licitación. Pero insistimos en que la asociación no debe generar desempleo, en ningún caso, ni en Paysandú ni en otro lugar donde están enclavadas las plantas. Seguiremos reclamando que se cumpla el compromiso de Presidencia, hace más de un año”, señaló.
Ferreira recordó que “en la década de 1990 hubo un referéndum donde la ciudadanía se pronunció a favor de las empresas públicas para que sean estatales. Hoy, a través de una iniciativa de asociación, dejaría a Ancap en desigualdad de condiciones en cuanto al paquete accionario. Esa asociación dejaría al privado con la mayoría para dirigir el negocio del portland. Y lo que nos preocupa es que, a pesar de lo que se ha dicho, no hay ningún documento que nos asegure que no se perderán puestos de trabajo. En el caso del Sunca, hay unos 300 trabajadores en las extractivas”.
EL COMPROMISO
El presidente de Federación Ancap Paysandú, Eduardo Zabala, señaló que en el acto “pusimos el foco en el compromiso tomado por el intendente Nicolás Olivera, el 4 de setiembre de 2020, cuando en plena campaña electoral aseguró y firmó el documento donde estaba dispuesto a defender a la industria estatal y pública”.
Consultado por las “pérdidas” financieras que argumenta el directorio del ente en el negocio de las plantas cementeras, el dirigente precisó que “las pérdidas de 20 millones de dólares no dejan de ser una verdad a medias. Porque la parte que no dicen, es que gestionaron para que ese resultado sea así. Se han parado las fábricas por falta de insumos, por falta de repuestos o por falta de personal, tanto en Minas como en Paysandú. Nos sacaron los presupuestos que hacen que una fábrica sea rentable y eso ha pasado sucesivamente desde hace muchos años. Es la misma política de achique y gestión para que quede esta situación y se deje en bandeja para que la manejen los privados”.
Explicó que “no debe ser tan malo el negocio desde que había 17 interesadas y a pocos días para el 12 de setiembre, hay 3 interesadas que se postulan y son todas de porte internacional”. Zabala remarcó que “hay gente a la que no logramos llegarle con la ley de compras públicas. El Estado lleva adelante obras, con cualquier cemento. Y recordemos que el principal comprador siempre es el Estado, porque de él dependen las obras públicas. Es decir, es el principal comprador pero no se compra a sí mismo. Le compra a Cielo Azul o a Cementos Artigas. Entonces, tenemos un grave problema”.
La caliza
Con respecto a la materia prima, Zabala precisó que “con la piedra caliza, tenemos que decir que es un recurso natural que no hay en todos lados. En Uruguay hay en abundancia y eso nos hace un país productor de cemento portland. En unos 500 o 600 kilómetros a la redonda no hay cómo producir cemento portland porque las canteras están para este lado del río Uruguay”.
Según el dirigente, “tenemos que recordar que la piedra caliza sale en torno a 10 dólares la tonelada y la tonelada de cemento portland oscila en 150 dólares. Hay una diferencia de 140 dólares que quedan en valor agregado, trabajo e impuestos. Es una cadena de ganancias muy grande”.
Explicó que “en la extracción de la piedra trabajan unas 15 personas y en la fábrica de cemento son alrededor de 250. Además, no debemos olvidar que para este proceso de asociación, el Estado tiene que desembolsar unos 70 millones de dólares. No le sale gratis, pero habla de economía y gestión”. Según Zabala, “con esa cantidad se puede instalar perfectamente la tercera línea de producción o sea, el horno 3, que no vale cien millones de dólares”.
El documento
El secretario general de la mesa departamental del Pit Cnt, Carlos Bico, señaló que ante la ausencia del intendente Olivera, “nos recibió su secretario personal y le entregamos un documento donde exhortamos que se ponga en campaña junto a las organizaciones sociales, en defensa de la planta del portland”.
El documento considera, entre otras cosas, “la realidad que sufre el departamento en materia de desempleo, la situación actual que ya tenemos, gente en el seguro de paro dentro de Ancap, que el pliego de licitación sigue en camino sin que en él se exija a la empresa oferente que conserve dichos puestos laborales, teniendo como evidencia el plan de incentivos presentado por Ancap en el cual se pone en duda la continuidad de las plantas y por ende las fuentes laborales”.
