Los presidentes del Banco Central del Uruguay (BCU), Diego Labat, y del Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU), Salvador Ferrer, coincidieron en una conferencia titulada “Desafíos del sector turístico ante la coyuntura económica”, enmarcada en el evento Foro Camtur, un espacio creado por la Cámara Uruguaya de Turismo (Camtur) destinado a charlas, talleres y reuniones en las que se abordan temas de actualidad e interés para el sector turístico.
Los jerarcas de los bancos oficiales refirieron allí a la actualidad y perspectivas del sector en el actual contexto económico, y coincidieron en destacar la relevancia de la industria turística en el desarrollo económico y social de Uruguay, “al promover el ingreso de divisas y la generación de puestos de trabajo”, según recabó la cámara en su página web.
PERSPECTIVAS
El titular del directorio del BCU hizo un resumen sobre la labor de la institución “para que la inflación se mantuviese en el rango de entre 3 y 6%”, y destacó que actualmente “se ubica en 4,79% en los últimos 12 meses, período cerrado en julio de 2023, con proyecciones que la sitúan en la meta citada para los siguientes dos años”. Asimismo expresó que la entidad estatal “no ha intervenido en los últimos dos años en el mercado de cambio, y agregó que el tipo de cambio permanecerá por debajo del valor sugerido hasta fines de 2025”.
Labat también reconoció “la falta de competitividad determinada por los lineamientos económicos actuales”. Sin embargo, entiende que es “la política más acorde para el país” y afirmó que espera que, en el corto plazo, Argentina reduzca su brecha cambiaria, “lo que mejorará las condiciones del momento”. En el mismo sentido consideró que las medidas solicitadas por empresas turísticas, en especial las ubicadas en el litoral termal “son imprescindibles”, al considerar que “el sector perdió 3.500 millones de dólares en divisas, situación que pone en riesgo la permanencia de compañías, emprendedoras/es y empleos durante los próximos años”.
RESILIENTES
Por su parte, Ferrer valoró la resiliencia del sector turístico uruguayo, al recordar que “perdió el 11% de empleos mientras el Producto Bruto Interno (PBI) disminuía un 35% durante la pandemia de COVID-19”, y refirió como una herramienta que ayudó a superar la crisis a “las medidas orientadas al financiamiento mediante los préstamos SIGA (Sistema Nacional de Garantías), usufructuados por 200 empresas que, en total, recibieron 12 millones de dólares”. También recordó la implementación de la tarjeta Recompensa como un instrumento que ayudó a promover el turismo interno.
ÁMBITOS
A su tiempo la presidenta de Camtur, Marina Cantera, valoró la importancia de generar ámbitos que ayuden a visibilizar y discutir las dificultades que enfrenta la recuperación plena del sector. “Estamos convencidos de que debemos continuar tendiendo puentes para generar soluciones efectivas. La situación cambiaria, entre otros factores, tiene un impacto decisivo para nuestra industria, y debemos abrir instancias de diálogo que nos ayuden a encontrar soluciones para la industria, una industria intensiva en la generación de empleo y decisiva en su aporte al producto nacional.
