Activista ambiental sanducera pide que “no mutilen los árboles”

Días pasados la activista ambiental sanducera y reconocida a nivel nacional, Belén Suárez Rocha, publicó en sus redes sociales su indignación al observar cómo se estaban podando los árboles en una vereda por la cual pasaba. “Esto no es poda, es mutilación”, decía la activista en su cuenta de Instagram (@ecobelu.uy) de casi 27 mil seguidores o “responsientes”, como les llama.

En diálogo con EL TELEGRAFO, Suárez explicó que “como activista ambiental fui entendiendo la importancia que tienen los árboles en las ciudades y el rol que cumplen. Muchas veces metidos dentro de la ciudad nos desconectamos de la naturaleza y para mí es vital que nos reconectemos con ella; que podamos resignificar nuestra relación con la naturaleza”. Explicó que, a su cuenta de Instagram, le llegan muchos mensajes de personas de todas partes del país que le cuentan cosas que pasan con el ambiente; lo que se hace bien y lo que se hace mal. Entre ellas, le mencionaban lugares en los que se talaban árboles o se realizaban podas exageradas.

“Tenemos que resignificar lo que de verdad es suciedad”

“Lo venía viendo hace un montón y ahora me tocó a mí de cerca”…, –no sé si fue un vecino o si fue la Intendencia– pero sí fue la gota que rebasó el vaso para decir: ‘Bueno, hay que reflexionar sobre esto a nivel de la sociedad toda’. Hay algo que no está bien. Somos muchas personas que nos damos cuenta que no está bien el manejo de las podas y hay que buscar dónde está la falencia. Me parece que en parte es porque muchas personas sienten que es mugre. Tenemos que resignificar lo que de verdad es suciedad y lo que contiene un montón de vida. Cada árbol trae una especie de ave, de insecto; nos dan sombra, belleza, oxígeno”. Suárez entiende que muchas de las talas se realizan por pedidos urgentes cuando peligra la seguridad de algún vecino, pero “me parece que le estamos errando feo porque se están haciendo mutilaciones”.

La activista no pretende culpar a vecinos o a la Intendencia “pero sí reflexionar sobre esta problemática. En el contexto global en el que estamos en que los científicos dicen que ya no es más cambio climático sino ‘ebullición global’; estamos a muy poquito tiempo de que llegue el verano y todos los que vivimos en Paysandú sabemos lo que se siente caminar por una vereda que no tiene árboles. Son 45° de sensación térmica”.
Opinó además que “tenemos que aprender a cuidar los árboles que ya tenemos y una mala poda le quita vida al árbol. ‘Un árbol que puede vivir 200 años va a vivir 100 y un árbol mal podado va a vivir 20’, eso lo decía Guillermo Grimoldi, quien es jardinero, especialista en podas. Es argentino y me contacté con él y me parecería súper interesante traerlo para capacitar a las personas que se encargan de la poda. Si no tomamos acción nos quedamos solo en la crítica y esa no es mi intención. Ahora veía en la cuadra de mi barrio, que los árboles tienen poda reciente y les queda solo el tronco”.

“No todos se ven beneficiadas de la poda”

Suárez explicó que, según el experto “no todos los árboles ni las plantas se ven beneficiadas de la poda. Hay una concepción errónea de decir que podarlos les va a dar más fuerza. Si se hace bien y es correctiva, sí. Si es una poda mal hecha, no. Al contrario, le va a sacar vida. Cuando llegan las vacaciones todos queremos ir a la playa y sentarnos debajo de un árbol. Lo hacemos todo el año. Nos sentamos debajo del arbolito para tomar mate. Pero para eso hay que cuidarlos y cuidarlos entre todos. Es un tema que tenemos que hablarlo todas las generaciones”.

Enfatizó, en la importancia de hacer entender a la gente que “los árboles no son basura. Ni las hojas, ni las florcitas” y en que miremos un poco más allá de “nuestros ombligos”; de buscar la salud ambiental general y comprender que con lo grave que está el planeta en los tiempos que corren, la caída de las hojas en las veredas no deberían ser motivo del tronchado de los árboles. “Tiene que primar este concepto de sostenibilidad. Capaz que tenemos que ‘aggiornarnos’. No podemos hacer algo porque toda la vida se hizo así. En el contexto global y pensar local hay que tomar medidas. Hay que encontrar un punto medio en la sostenibilidad. Estamos perdiendo muchísimos árboles, con lo que demora en crecer un arbolito nuevo”. La reconocida activista comentó además que estuvo trabajando en un proyecto para plantar más árboles. “Estuve trabajando todo agosto en ese proyecto y cuando veo estas cosas me digo que es un avance y un retroceso constante”, indicó.