Puede que el agua del río Uruguay no tenga la transparencia y color verde característico de las playas del Este de nuestro país, pero para quienes gustan del agua dulce el paterno presenta una gran ventaja para los baños recreativos. Mientras en la costa oceánica hay que “juntar coraje” para tomar un baño, debido a que el agua suele estar muy fría –en general se da que cuanto más limpia se ve, más fría se encuentra– en el paterno en verano el agua se calienta por efecto de la temperatura ambiente y la acción del sol, al punto que puede percibirse casi como termal. Y durante la pasada ola de calor que finalizó el pasado lunes, alcanzó valores realmente inusuales. Precisamente ese día, de acuerdo a la medición oficial de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), en Paysandú alcanzó los 30,2ºC en el punto de medición local, aún cuando se encontraba en cota 1,97 metros respecto al cero del puerto sanducero y por lo tanto, corría bastante.
Eso es notoriamente más cálido que los 20,3ºC que registra Punta del Este actualmente, que obligan al bañista a estar en permanente movimiento para evitar que se entumezcan las extremidades. De hecho los 30,2ºC del río Uruguay están más cerca de los 32ºC del agua del pozo de las termas de Almirón que de las playas del Este de nuestro país.
Dadas las altas temperaturas que se registraron durante la ola de calor, muchos sanduceros decidieron aprovechar las playas hasta altas horas de la noche, disfrutando así del privilegio de poder permanecer cómodamente sumergidos con el agua hasta el cuello aún cuando el sol ya se había ocultado hacía rato.
Este fenómeno no es exclusivo de Paysandú, sino que se ha dado en todas las estaciones de medición de CARU en mayor o menor medida.
El mismo lunes 12, en Concepción del Uruguay marcaba 29,8ºC, en Nuevo Berlín 30,5ºC, en Fray Bentos 30,4ºC y en Nueva Palmira 29,1ºC.
