Una enorme victoria sanducera que significó el pasaje a la final de la Copa Nacional de Selecciones de OFI y además representó tomarse revancha de la finalísima del Regional Norte Litoral. Anoche, Paysandú le ganó nuevamente a Fray Bentos, esta vez por 2-1 en el Parque Liebig’s –había sido por 3-1 en el Estadio Artigas–, jugando un gran partido táctico y dejando que el rival hiciera el desgaste.
La Blanca ha mostrado crecer en cada etapa de la Copa y esta llave contra los fraybentinos la comenzó a ganar en casa, cuando sacó una ventaja que le dio tranquilidad para disputar este segundo duelo en el que sacó de quicio a su contrincante.
Como estaba previsto, desde un principio Fray Bentos salió a apretar a Paysandú en campo rival para buscar la apertura lo antes posible. Pero se encontró con una defensa sanducera bien plantada y un mediocampo que hacía un trabajo a destajo, con una gran labor en la marca de Mattiauda y Cuelho.
Un gran remate de Zoppi que lamió el palo izquierdo de Giossa a los cuatro minutos hacía presagiar un vendaval sobre el arco del buen arquero de la Blanca. Sin embargo, el encuentro comenzó a tornarse trabado y con muchas faltas, lo que le convenía a Paysandú, que hacía correr los minutos al tiempo que buscaba el contragolpe buscando a Andrioli y saliendo en velocidad por las bandas a través de Sabaño o Duarte.
A los dirigidos por Carlos Cabillón les faltaba tener la pelota con mayor asiduidad y recién pudieron rematar al arco sobre la media hora de juego, con un disparo de Duarte que atajó bien el golero González. Mientras tanto, Fray Bentos entraba en el apuro y en las malas resoluciones en ofensiva más allá de otra tapada de Giossa a Ramírez a los 35 minutos.
Sobre el final de la primera mitad llegaron los mejores instantes de la visita en ese período. Tomando el control de las acciones, más asentado en el partido, comenzaba a desbordar a una defensa fraybentina que no se mostraba del todo segura. Así cayó el tanto de Sabaño a los 41 minutos luego de un centro rastrero de Duarte que un zaguero no pudo despejar; allí el volante la encontró en el área y con un toque sutil de zurda la mandó al fondo de la red.
Un tanto que dio mucha tranquilidad a la Blanca, que se fue al descanso con una buena diferencia para administrar en el complemento. Y así lo hizo pese a que por momentos cedió demasiado terreno que permitía que el local jugara muy cerca del área sanducera. En ese contexto, Fray Bentos se creció y tuvo sus mejores momentos llegado al cuarto de hora del segundo capítulo, reflejados en un par de ocasiones propicias para empatar; no obstante, se volvió a encontrar con la figura de Giossa en la valla de Paysandú tapando un mano a mano a Zoppi y poco después un furibundo remate de Cabral.
Superado el asedio –en el que la Blanca se cargó con amarillas–, el conjunto visitante volvió a plantarse un poco más adelante en la cancha, aprovechando la línea de tres en el fondo con la que pasó a jugar Fray Bentos al acumular jugadores en ofensiva. Y en un segundo de inspiración, Rossi –rodeado por tres marcadores– vio de reojo cómo Andrioli le marcaba el pase y le envió la pelota medida para que el goleador sanducero definiera por arriba del arquero González.
Golazo a los 72 minutos para comenzar a cerrar la historia y a sellar el pasaje a la final contra Colonia. Lo que quedó del encuentro estuvo de más, aunque mostró el pundonor de una selección de Fray Bentos que –pese a tener que marcar cinco goles para pasar– no dejó de apretar y buscar al menos un gol. Así logró descontar, en el minuto 80, con un remate cruzado de Rosano al encontrar un balón mal despejado por la defensa sanducera.
Paysandú administró bien los esfuerzos, jugó con la ansiedad y la desesperación del rival, no dejó lugar a las sorpresas y terminó celebrando el tan ansiado boleto a la gran final de la Copa Nacional de OFI. Una oportunidad histórica para este joven grupo de jugadores.
